Las autoridades ucranianas han denunciado al menos doce muertos y 64 heridos tras un ataque ruso contra un edificio residencial en la ciudad de Dnipro, en el este del país.
«Un misil ruso se ha llevado ya la vida de doce inocentes», ha publicado el gobernador militar de la región de Dnipropetrovsk, Valentin Reznichenko, en su cuenta en la red social Tlegram.
Previamente, el propio Reznichenko había informado de nueve fallecidos, entre los que hay una niña de 15 años, así como de los 64 heridos, de los que 59 están hospitalizados. El resto están recibiendo atención en sus propias casas.
«El misil ruso ha traido el pesar a decenas de familias de Dnipró», se ha lamentado. El edificio ha sido alcanzado por, al menos, un misil y hay un número todavía indeterminado de personas que se encuentran bajo los escombros.
«Estos rusos simplemente son inhumanos», ha lamentado por su parte el director adjunto de la oficina de la Presidencia ucraniana, Kirilo Timoshenko. «Al menos una escalera ha desaparecido. Bajo los escombros hay gente que estaban de regreso en casa por vacaciones», ha añadido.
El Ministerio de Exteriores ucraniano ha publicado una imagen, según las autoridades, del edificio alcanzado, cuya fachada presenta graves daños materiales.