El 30 de marzo del 2021, Elisa Muñoz y Joel Díaz transitaban por la autopista Duarte en dirección norte – sur, luego de encabezar una jornada de oración de cuatro días en la comunidad Los Colgados, próximo al municipio Villa Altagracia.
A esa fecha, Muñoz y Díaz llevaban menos de dos meses de casados, ya que contrajeron matrimonio apenas el siete de febrero, e incluso se desplazaban en el mismo vehículo en donde se conocieron por primera vez, marca K5, color blanco.
Ella era en ese momento una mujer de 33 años de edad y que dos años atrás había retornado desde Italia donde residió por 11 años junto a su madre, y decidió quedarse en el país cuando conoció a Joel, y empezó a trabajar en una tienda de estética y se dedicó a la prédica de la Palabra. Él, de unos 35 años de edad, tenía un empleo fijo en el Ministerio de Educación, e inmediatamente terminaba su jornada laboral allí, tomaba el vehículo para realizar servicios de Uber.
Ambos se habían unido a una congregación cristiano-evangélica y predicando la palabra de Dios era que se encontraban en Los Colgados, antes de emprender el camino que los llevaría a atravesar por un tramo de la autopista Duarte poco iluminado alrededor y con un retén policial colocado que hacía disminuir la marcha de todos los vehículos que circulaban delante de ellos.
Pasaban las 10 de noche de ese martes Santo, cuando los agentes policiales que se encontraban en el retén le hicieron señas a Joel para que se le adelantara a los otros vehículos en la fila. En ese instante comienzan a dispararles de frente, sin haberles preguntado o advertido a los ocupantes del vehículo sobre alguna situación.
«Nos hicieron parada, luego que nos hicieron parada comenzaron a apuntarnos y dispararnos y yo me abajé. Cuando pararon pude ver que mi amigo que se encontraba delante estaba herido en el cuello, luego parece que al él desmayarse se aceleró el carro un poco, y se fue en vía contraria, no sé, pero al ellos ver que el carro volvió a moverse continuaron disparando”, expresaba Claudio Ramírez, quien junto a Carlos Pérez eran los dos acompañantes de Joel y Elisa, a las afueras del destacamento de Villa Altagracia hacía donde fueron trasladados.
Ramírez y Pérez, aunque confundidos, tenían la certeza de que sus amigos que iban en los asientos habían sido muertos por las diferentes ráfagas de disparos y fue a ellos que les tocó dar la noticia a los familiares.
¿Por qué?
El expediente acusatorio que presentó el Ministerio Público señala que la acción pasó cuando el coronel César Maríñez Lora, quien se encontraba en ese momento al mando de los agentes de Villa Altagracia , luego de escuchar a través de la radio de comunicación de la Policía Nacional, que un carro blanco, marca Hyundai, sin bumper, había cometido varios atracos en Bonao y que el mismo se dirigía en dirección a Santo Domingo, improvisó un retén junto a parte de los acusados, uno de ellos fuera de servicio.
“El coronel Maríñez Lora, en compañía de los acusados Victorino Reyes Navarro, Ángel de los Santos, Guillermo Rosario Melo (quien no estaba de servicio) y Emil Alexander Rincón Martes, quienes se encontraban en el destacamento policial, abordaron la camioneta de la Policía Nacional y se dirigieron a la entrada norte de Villa Altagracia, frente al Hotel-Cabaña Mi Primavera, siendo los primeros en llegar al lugar, unos minutos después llegan dos unidades motorizadas compuestas por el sargento Domingo Perdomo Reyes, Norquis Rodríguez, Juan Samuel Ogando Solís y Anthony Castro”, explica la acusación.
Luego de cometer el hecho, la acusación señala que la coartada para defender la acción era simular un intercambio de disparos y que por ello el coronel ordenó hacerle varios disparos a la camioneta de la Policía.
En prisión
Por el hecho guardan prisión preventiva Maríñez Lora y los agentes policiales Guillermo Rosario Melo, Emil Alexander Rincón Marte, Victorino Reyes Navarro, Domingo Perdomo Reyes, Norquis Rodríguez Jiménez, Ángel de Los Santos, Anthony Castro Pérez y Juan Samuel Ogando Solís.
En juicio de fondo
El pasado cuatro de noviembre, el Juzgado de la Instrucción de Villa Altagracia envió a juicio de fondo a los nueve miembros de la Policía luego de acoger el pedimento realizado por el Ministerio Público.
El LISTÍN DIARIO se comunicó con el abogado José Martínez Hopelman, quien representa a la pareja de pastores y este manifestó que las audiencias transcurren a “ritmo normal” y que por el momento no tiene comentarios con relación al mismo.
El caso del padre de Elisa
Durante las investigaciones, el Ministerio Público acusó al padre de Elisa, Marino Antonio Muñoz Concepción / Ronny Muñoz, de comprar armas en Filadelfia para matar a los policías y que presuntamente serían utilizadas por el imputado el próximo 2 de marzo, día en que se conocerá audiencia.