Para la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), el Código de Ética presentado por el Ministerio de Educación (Minerd) resulta redundante, limitado y desconocedor de los principios, objetivos y medidas disciplinarias, que ya están concebidas en 11 artículos del decreto No. 639-03, que establece el Estatuto del Docente en la República Dominicana.

En un comunicado, el gremio expresó que el ministro de Educación, Ángel Hernández, a través de la Orden Departamental No. 13-2023 sólo hace extensivo a los directores de los centros educativos, algunos de los principios y amonestaciones, que ya están concebidos en el Estatuto del Docente y que fueron aprobados hace 20 años.



“En tal sentido, de los artículos 93 al 104 del Estatuto del Docente establecen el régimen disciplinario aprobado, que procura que las faltas disciplinarias sean juzgadas sobre la base de criterios de objetividad e imparcialidad y conforme a un procedimiento rápido, que garantice el derecho de defensa y las reglas del debido proceso”, expresa la entidad.

Entiende que, con el Estatuto establecido, se procura, también, dar participación al centro educativo y a la comunidad educativa, en el juzgamiento de los hechos investigados, incluyendo las propias autoridades.



“Por lo tanto, el Código de ética que proponen las presentes autoridades del Minerd, realmente, queda corto, a las medidas disciplinarias que ya están establecidas en el sistema educativo”, recalcó.

Agregó la ADP que el gran reto del Ministerio de Educación es predicar con el ejemplo, asegurando que ha fracasado en lograr la creación y la ejecución de las políticas socioeducativas necesarias, que reduzcan los males sociales y familiares, que son el origen real de las incidencias que se dan en el sistema escolar público dominicano, que solo son una muestra de sólo el 48 % de las escuelas públicas, el pasado mes de abril.

Reporte de incidencias escolares
La ADP también emitió su opinión sobre el reporte del Ministerio de Educación que da cuenta de los casos de embarazos en adolescentes, hechos de violencia entre estudiantes, docentes y personal de apoyo, entre otros hechos y asegura que los datos evidencian una gestión que no ha sido capaz de entender, ni dar la atención requerida, a las verdaderas necesidades del sistema educativo.

“Tampoco, ha manejado correctamente la seria crisis socioeducativa que atraviesa la República Dominicana y, erróneamente, refleja el problema educativo en la figura del docente, lo cual revela su propio nivel de impericia y desconocimiento, sobre la realidad educativa nacional”, concluyó el gremio.