Las madres de varios estudiantes expulsados del Instituto Politécnico Pilar Constanzo pidieron este lunes al ministro de Educación, Ángel Hernández, intervenir para que sus hijos no pierdan el presente año escolar.
Las señoras María Cristina Díaz Durán, Lidia Mora, Rudith Ramírez, Dayanna Añez López y Josefa de Jesús expresaron que sus hijos fueron acusados por la dirección del plantel de usar un cigarrillo electrónico, pero consideran que esa no es razón suficiente para condenar a esos adolescentes a perder un año de clases.
Se quejaron de que los estudiantes fueron acusados en noviembre del año pasado y fue en marzo de este año cuando los padres fueron informados de la situación por la dirección del centro.
Manifestaron que han recorrido todas las instancias del Ministerio de Educación buscando una solución al problema, porque consideran que la expulsión de los estudiantes no debe ser la última opción.
De acuerdo a Pilar Moreno en EL NACIONAL, las madres denunciaron que sus hijos están sometidos a múltiples maltratos psicológicos.
“Nuestros hijos confesaron el hecho por presión, hostigamiento, y amenaza de la directora, sor Yrma Pérez; de la coordinadora de la Convivencia, Levis Perez y de otros psicólogos del referido centro”, indicaron en una nota de prensa enviada a este diario.
“A nuestros hijos adolescentes se les violaron todos sus derechos durante cuatro meses, desde el mes de noviembre hasta el mes de marzo que es cuando se les comunica a los padres del hecho supuestamente cometido por ellos”, indicaron.
“Estamos apelando a la sensibilidad del ministro de Educación, Ángel Hernández, que también es padre y conoce el esfuerzo que hace una madre para levantar a sus hijos”, indica la nota.
Negaron que los jóvenes estén recibiendo docencia, como ha informado a la Distrito Escolar.
Saludos, hay un protocolo
de actuación y normas de convivencia donde están los lineamientos para las faltas leves, graves o muy graves, eso de que la familia no sabía de lo que estaba pasando con sus hijos lo dudo.
Los padres debemos estar más pendiente de los pasos que dan nuestros hijos y no tapar el sol con un dedo.
Saludos: Es necesario que los padres tambien reconozcan los derechos de los alumnos juntos a los deberes de estudiar y cumplir con las normas, asi como la convivencia familia-escuela. Da que pensar que algo sucedió en noviembre y la familia diga no estar entereda, significa que no le da seguimiento a la formación en valores de sus hijos. Los padres lo sabian eso o por lo menos saben el tipo de hijo que tienen,pero quieren que la escuela no ponga limites, igual que ellos en sus casas.Qué pena no estén formando en valores y que la escuela esté sola y los alumnos la confundan con un drink !
No creo que los padres no se les enviara una comunicación, existe un protocolo para estos casos y ojala estos no sean de los padres apoyadores que solo asisten al centro cuando las cosas llegan a este extremo, ellos sabían que sus hijos usaban cigarrillos electrónicos y lo tomaron como algo normal, si es desde noviembre ellos lo sabían y dejaron eso así, hasta que les llego la expulsión del centro.