El Día de las Madres es una celebración extendida en gran parte del mundo, y rinde honor a la labor maternal que millones de mujeres desempeñan. En principio, este día busca reforzar la conciencia acerca del sostén emocional y social que representan estas figuras clave de la estructura familiar.

La historia del Día de las Madres tiene antecedentes en el Antiguo Egipto, Grecia y Roma, lugares donde había un tiempo dedicado a conmemorar el simbolismo de la maternidad. Por su parte, los egipcios honraban a la diosa Isis, quien era considerada la madre de los faraones y protectora de los habitantes del antiguo imperio.



Los griegos celebraban a Rea, deidad asociada a la fertilidad y maternidad. Y los romanos hacían lo propio durante tres días, en una fiesta llamada la Hilaria, para Cibeles, la diosa madre.

Ya en el mundo cristiano, la figura de la madre ha estado siempre encarnada en la Virgen María. La fecha dedicada a ella es el 8 de diciembre, un día conocido como la Inmaculada Concepción. Para países donde esta religión es la predominante, el Día de las Madres era acomodado, de forma justificada, en el mismo lugar del calendario. Así fue hasta tiempos no tan lejanos.



Dia de las Madres en República Dominicana

La historia cuenta que en República Dominicana la celebración a las madres se inició después de la desocupación estadounidense, durante el gobierno del General Horacio Vásquez, en 1926. En ese entonces, la primera dama Doña Trina de Moya y Ercilia Pepín, educadora de Santiago, segunda ciudad del país, fueron la primeras en promover la festividad.

En esta fecha se constituyó en Santiago de los Caballeros el primer Comité Pro-Día de las Madres y se estableció como símbolos el clavel rojo para la madre viva y una azucena o nardo para la madre fallecida; todos propusieron vestir de rojo o blanco según el caso.

Aquel día quedó establecido por ley que el Día de las Madres debía celebrarse el último domingo del mes de mayo, como todavía sucede.

La primera celebración oficial fue el 30 de mayo de 1926 y para ello se organizaron actos públicos y escolares, veladas, visitas colectivas al cementerio y se emitieron publicaciones en las que se explicaba las razones del homenaje.

Desde entonces y hasta la fecha las cosas han cambiado, en esa época era costumbre regalar rosas, besos, abrazos y mucho cariño. Hoy la fecha es más comercial y aprovechada para el consumo de grandes sumas de dinero en regalos.

Aunque lo forma de festejo no es igual, la fecha es propicia para reunir a las familias y honrar a las madres.