Raúl Hernández, Ex Director de Pasaportes expresó su preocupación y perplejidad ante las decisiones contradictorias tomadas por el gobierno en relación a la modernización de los pasaportes.
Durante una entrevista en “Las Exclusivas de José Peguero, Hernández señaló que resulta incomprensible que, a pesar de contar con dos resoluciones de la Dirección General de Alianza Público Privada que respaldan y autorizan un proyecto de modernización de pasaportes electrónicos, el gobierno esté adquiriendo un millón de unidades de pasaportes biométricos, lo cual parece contradecir la iniciativa de la Presidencia de la República.
Según las resoluciones mencionadas, la Dirección General de Pasaporte debería encargarse de coordinar el proyecto de modernización junto a otras 17 o 19 instituciones. Explicó que un pasaporte electrónico es prácticamente igual al pasaporte actual, con la diferencia de que incluye un chip similar al de una tarjeta de crédito, lo cual aumenta los niveles de seguridad y representa una tendencia adoptada por muchos países.
Hernández enfatizó que el pasaporte es un documento de seguridad nacional y que cumple la función de identificar a los ciudadanos cuando salen del país. Consideró que la situación actual es un autogol para el gobierno, comparable a cometer un error en contra de su propio equipo durante una serie mundial de fútbol.
El exdirector de Pasaportes durante el primer gobierno de Leonel Fernández manifestó su sorpresa ante la reciente convocatoria de licitación para adquirir un millón cincuenta mil libretas de pasaportes biométricos, cuando previamente se anunció que se recibirán 400,000 libretas el 1 de abril y otras 400,000 en el futuro. Sostuvo que esta contradicción plantea interrogantes sobre el proyecto de modernización y las decisiones del gobierno.
Hernández cuestionó la lógica detrás de adquirir un millón de unidades de pasaportes biométricos si el objetivo del gobierno es transicionar hacia el pasaporte electrónico. Consideró que esta contradicción pone en duda la coherencia de las acciones gubernamentales y el rumbo del proyecto de modernización.
Rau1l experto concluyó destacando que, si él fuera el director de la Alianza Público Privada, se reuniría con el presidente para expresar su preocupación. Además, señaló que le resulta incomprensible que se haya trabajado en la emisión de resoluciones, en la aprobación del proyecto de modernización y ahora la Dirección General de Pasaporte esté contratando un millón de libretas que comprometerán el año 2024.
Ante estas declaraciones, surgen interrogantes sobre la planificación y la coherencia de las decisiones relacionadas con la modernización de los pasaportes en el país. El líder político espera una respuesta clara por parte de las autoridades competentes para aclarar esta aparente contradicción y asegurar una gestión eficiente y transparente en este importante proyecto.
