Los jueces del Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional continuaron con el conocimiento del juicio contra los once civiles y policías acusados de provocar la muerte a David de los Santos Correa a causa de los golpes que recibió en el destacamento del ensanche Naco, de la capital, tras ser retenido y entregado a la Policía por los miembros de la seguridad de la plaza Ágora Mall.
El tribunal que integran los jueces Esmirna Gisselle Méndez, Tania Yunes Sánchez y Jissel Naranjo, escuchó al Ministerio Público, representado por las fiscales, Magalys Sánchez, María Silvestre y Mariela Ramos, quienes iniciaron ayer miércoles la presentación de las pruebas testimoniales con los primeros cinco testigos aportados por el órgano acusador.
Esos testigos fueron los señores Juan de los Santos Hernández, Damiana Correa y Sugeidy Correa, padre, madre y hermana del occiso David de los Santos, así como el primer teniente policial Edwin Montero Encarnación y un ciudadano haitiano que sirvió de interprete al testigo estrella de la Fiscalía del Distrito que presenció la salvaje golpiza que le propinaron tres reos al hoy occiso en una celda del cuartel policial del ensanche Naco la noche del 27 de abril del 2022.
Ayer la audiencia fue recesada para este jueves a las 9:00 de la mañana y conforme al calendario dispuesto por el tribunal, se espera que el proceso concluya este viernes 16 de junio. Como medida precautoria, las juezas ordenaron que los acusados que tienen prisión preventiva sean retenidos hasta mañana en la cárcel provisional que funciona en el Palacio de Justicia de Ciudad Nueva.
Por el crimen son procesados los civiles Santiago Mateo Victoriano, Michael Pérez Ramos y Jean Carlos Martínez Peña, y los agentes capitán Domingo Alberto Rodríguez, el segundo teniente Germán García de la Cruz, el cabo Alfonso Decena Hernández y el raso Sari Manuel González García.
De igual modo, Ambriori Montero Otaño, Álvaro David Beltrán Pérez, Yubaris Méndez Ferreras y Juan Reyes de la Cruz, miembros seguridad privada de la plaza Ágora Mall.
La Fiscalía del Distrito Nacional los acusa de incurrir en delitos de homicidio, tortura y barbarie y asociación de malhechores, por lo que podrían enfrentar penas de hasta 30 años de prisión.
