Los precios del petróleo volvieron a subir el miércoles beneficiándose de la caída del dólar y de la recuperación del apetito por el riesgo, en un contexto de oferta limitada por parte de la Opep+.

El barril de Brent a entrega en octubre ganó un 1,60%, hasta 87,55 dólares, su nivel más alto desde enero en el mercado de Londres.



Su equivalente estadounidense, el WTI para entrega en septiembre, subió 1,78% a 94,40 dólares; su mayor valor desde noviembre de 2022.

El crudo de Texas «está en su nivel más alto desde que la OPEP+ decidió recortar su producción en 2 millones de barriles en noviembre», comentó Robert Yawger, de Mizuho Securities.



La producción del grupo Opep+ (Opep y sus aliados) alcanzó en julio su nivel más bajo en casi dos años, según una encuesta de S&P Global.

El mes pasado, la producción saudí bajó 9,05 millones de barriles por día (bpd), la menor desde junio de 2021, sobre un total de 40,4 millones bpd del bloque Opep+.

Riad también anunció la semana pasada el aumento de sus recortes voluntarios de producción en un millón de barriles diarios hasta septiembre. Rusia hizo lo propio anunciando una reducción de sus exportaciones de petróleo de 300.000 barriles diarios.

Los precios del petróleo también se beneficiaron de la recuperación del apetito por el riesgo de los inversores y de la caída del dólar, después de que un funcionario de la Reserva Federal estadounidense estimara el martes que los tipos de la institución podrían permanecer estables en su próxima reunión de septiembre.