La Organización Mundial de la Salud designó esta semana a una nueva variante de covid-19 como “variante de interés”, la cual está detrás de los aumentos de casos del virus alrededor del mundo.

Su nombre científico es EG.5, aunque coloquialmente se la conoce como Eris. Según la OMS, esta variante está relacionada con una de las subvariante de ómicron.



A nivel global, durante la semana del 17 al 23 de julio, por ejemplo, la prevalencia de Eris fue de 17,4%.

Este es un aumento notable respecto a la información reportada cuatro semanas antes, cuando la prevalencia global fue de 7,6%”



Detalla Noticias SIN que aunque los casos están en aumento, es importante destacar que se trata de una variante que no presenta un riesgo particular a la salud pública.

Y si bien es más contagiosa y puede evadir la inmunidad, no provoca una enfermedad más virulenta en comparación con otras variantes.

Los síntomas de Eris no varían mayormente de los síntomas de covid a los que ya estamos acostumbrados, y pueden variar en su intensidad: desde leves a más graves.

Incluyen:

-Fiebre o escalofríos

-Dolor de cabeza

-Dolor muscular o del cuerpo en general

-Dificultad para respirar

-Pérdida del sentido del gusto o del olfato.

También puede dar lugar a tos, estornudos y mucosidad.

El problema es que como estos síntomas pueden confundirse fácilmente con los de una gripe, ahora que ya casi no se hacen pruebas de detección, es muy fácil contraer la enfermedad sin identificarla como tal.

Se estima que las vacunas y refuerzos actuales sirven como protección, con lo cual los expertos recomiendan continuar con esta estrategia, así como mantener las conductas aprendidas durante la pandemia como el uso de mascarillas, sobre todo en entornos muy concurridos y ventilar regularmente los ambientes cerrados.