El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) español podría abrir este lunes un procedimiento al presidente de la Federación de Fútbol Luis Rubiales, contra el que la fiscalía ha abierto diligencias previas por un «presunto delito de agresión sexual» por el beso forzado en la boca a la jugadora Jenni Hermoso.

El TAD podría este lunes seguir los pasos de la FIFA, tras la denuncia presentada el viernes por el Consejo Superior de Deportes (CSD), dependiente del gobierno español.



El máximo organismo del fútbol mundial suspendió el sábado a Rubiales «de toda actividad relacionada con el fútbol a nivel nacional e internacional» por un periodo inicial de 90 días mientras «se tramita el procedimiento disciplinario» abierto en su contra.



Si el TAD, reunido desde las 11h00 GMT, abre un expediente a Rubiales, la Comisión Directiva del CSD se reuniría para suspender a Rubiales.

«Estamos pendientes de su resolución. Seguimos pensando que esta denuncia tiene todos los fundamentos jurídicos para que sea atendida como una falta muy grave», explicó este lunes el secretario de Estado para el Deporte y presidente del CSD, Víctor Francos.

Si el TAD acepta la denuncia del CSD, la previsión es que «la suspensión (de Rubiales) sea ‘sine die’ hasta que el TAD resuelva jurídicamente el procedimiento», añadió en rueda de prensa.

El CSD presentó una denuncia ante el TAD por dos «infracciones muy graves» por un posible «abuso de autoridad» y «actos que atentan a la dignidad o decoro deportivos» solicitando la suspensión cautelar de Rubiales.

– Investigación penal –

Junto a la justicia deportiva, en la vía penal la fiscalía de la Audiencia Nacional, principal instancia penal española, ha decidido abrir diligencias por un «presunto delito de agresión sexual», según señaló en un comunicado.

La Fiscalía afirma basarse en las «manifestaciones públicas» de la jugadora, pero contactará con ella para ofrecerle la posibilidad de formalizar una denuncia, un paso clave para que la vía penal pueda avanzar.

En la entrega de medallas tras ganar España la final del Mundial, Luis Rubiales dio un beso forzado en la boca a Jenni Hermoso, que suscitó un sinfín de críticas nacionales e internacionales desde todos los ámbitos de la sociedad.

«Me sentí vulnerable y víctima de una agresión», aseguró Hermoso en un comunicado el pasado viernes, después de que Rubiales afirmara que el beso había sido «espontáneo, mutuo, eufórico y consentido» en una asamblea de la RFEF.

«Lo sucedido no representa a la sociedad española», afirmó este lunes la número tres del gobierno español, Yolanda Díaz.

La Federación Noruega de Fútbol emitió un comunicado apoyando a «Jenni Hermoso, las jugadoras españolas y a todas las jugadoras del mundo que luchan por derechos básicos e igualdad de oportunidades».

La presidenta de la Liga femenina, Beatriz Álvarez, pidió la dimisión de todos los que aplaudieron el discurso de Rubiales negándose a dimitir en la asamblea de la RFEF.

– Reunión de la RFEF –

Entre ellos se encontraban los seleccionadores femenino, Jorge Vilda, al que le ha dimitido casi todo su equipo técnico por la decisión de Rubiales, y masculino, Luis de la Fuente.

Ambos consideraron posteriormente «inaceptable» la actitud de Rubiales, cuando fue suspendido por la FIFA, pero la imagen de ambos ha quedado muy debilitada.

«Los seleccionadores que aplaudían al señor Rubiales no están capacitados para continuar en sus puestos», dijo Yolanda Díaz.

La situación de los seleccionadores podría ser uno de los temas a tratar en la reunión «extraordinaria y urgente» convocada para este lunes por el presidente interino de la RFEF, Pedro Rocha.

La reunión de la RFEF se ha convocado para hacer un «análisis de la situación actual y evaluación de las decisiones o actuaciones a adoptar» tras la suspensión de Rubiales por parte de la FIFA.

En Motril, la madre de Luis Rubiales, Ángeles Béjar, empezó una huelga de hambre en una iglesia de la localidad andaluza donde creció Rubiales, para denunciar una campaña de «acoso y derribo» contra su hijo y pedir que «Jenni diga la verdad».