La Asociación de Industrias Editoriales de la República Dominicana (Adierd) insiste en que los libros de texto producidos por el Ministerio de Educación, a través del proyecto “Libro Abierto” deben ser retirados de las escuelas, pues aseguran acusan graves problemas conceptuales y no se corresponden con las normativas curriculares vigentes.

Pablo Cuello, presidente de la entidad, catalogó de alarmante y preocupante el deterioro en la calidad y la distribución de los nuevos libros de texto y subrayó que la situación compromete la educación de toda una generación de estudiantes dominicanos.



De acuerdo a lo denunciado, los libros de Lengua Española y de Matemáticas de 2º grado, del Primer Ciclo de Educación Primaria no enseñan adecuadamente porque con frecuencia no tratan el contenido de Lengua Española o de Matemáticas que anuncian en sus páginas.

«El objetivo de la denuncia es garantizar una educación de alta calidad para todos los estudiantes» Pablo Cuello Presidente de Adierd “



Indica la Adierd que los textos priorizarían y mezclarían temas ajenos al área, como el de la falta de documento de identidad o el de las enfermedades. Con ello distraen la atención sobre el contenido de la materia y sin atención no hay aprendizaje.

“Las explicaciones extremadamente largas y complejas sobre los contenidos están desvinculadas de los mismos, son difíciles de comprender y, una vez más, desvían la atención de los niños; se ignorarían los procedimientos adecuados para tratar la comprensión de los conceptos y habría muy pocas actividades y estas actividades con frecuencia están desvinculadas de los contenidos y cuando lo están, son insuficientes y superficiales”, agregan las editoras.

Hechos por entidades sin experiencia

De acuerdo a el Diario Libre, la investigación realizada por las editoras asociadas a la Adierd indica, además, que los textos producidos por el Ministerio de Educación en acuerdo con universidades y otras entidades sin experiencia en la elaboración de estos materiales educativos violentan la progresión y mezclan conceptos sin explicación alguna.

Consideran que las competencias, los indicadores de logro y demás informaciones deben figurar en la guía del maestro y, en última instancia, no hay guía al final del libro del alumno.

“En efecto, el tamaño de la letra impide su lectura a niños que se están alfabetizando. Aun suponiendo que algunos de ellos supieran, no entenderían ni tendrían por qué entender un tipo de lenguaje que concierne al maestro. En algunos casos, incluso, esas explicaciones superan el nivel de los contenidos de ese grado”, expresa el levantamiento.

Igualmente citan las editoras que abundan los textos en los que el tamaño de la letra es inferior a los 16 puntos requeridos en este nivel. Por otro lado, el texto debe ocupar toda la página para facilitar su lectura.

Además, señala que ninguna de las líneas del libro del alumno debe terminar en una preposición, que establece una relación de dependencia entre dos o más palabras; ni en un determinante, que acompaña a un sustantivo; ni en verbo auxiliar de un tiempo compuesto, porque dificulta la legibilidad del texto.

Suministro de libros insuficiente
La Asociación de Industrias Editoriales de la República Dominicana también alertó sobre el deficiente suministro de libros, señalando que solo se ha distribuido un 10 % de los textos necesarios para el actual año escolar, es decir, apenas nueve títulos individuales, indicando que “esta negligencia compromete la calidad de la educación de todos los niños dominicanos”.

En una rueda de prensa, la entidad que agrupa a una parte de las editoras de libros de textos, manifestó que la crisis se agrava al observar la ausencia total de libros de texto en el nivel inicial. “Cursos como Pre-kinder, Kinder, Pre-primario y primer grado están seriamente afectados al no contar con materiales educativos, ni en formato físico ni digital. Además, libros en áreas como Artística, Educación Física y Lengua Francesa están completamente ausentes tanto en bibliotecas como en plataformas digitales.

“Frente a esta situación crítica, desde la Adierd ofrecemos nuestra colaboración al gobierno dominicano para encontrar soluciones inmediatas que estabilicen el sistema educativo del país. El objetivo es garantizar una educación de alta calidad para todos los estudiantes dominicanos, de acuerdo con las normativas jurídicas y educativas vigentes”, concluyó la entidad.

Han llevado proceso a tribunales

El pasado ocho de agosto el Consejo Nacional de Educación (CNE) aprobó las tres ordenanzas que establecen el currículo, el sistema de evaluación y la bibliografía de libros de texto para los niveles Inicial, Primario y Secundario del año escolar 2023-2024 en formato impreso y digital.La aprobación se hizo a pesar de las denuncias de supuestas irregularidades advertidas en un acto de intimación de la Adierd en el que acusaba al Ministerio de Educación de ser juez y parte en la elaboración y aprobación de los nuevos libros de textos y de violar la ordenanza 26-2021 que establece que las bibliografías aprobadas por el consejo tienen una vigencia de cuatro años, entre otras situaciones. La intimación buscaba el cumplimiento de las disposiciones de la Ley General de Educación y del Reglamento de Evaluación de los Medios y Recursos para el Aprendizaje, basados en la ordenanza 26-2017 establecida por el CNE.