La Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC) informó este martes que el cubano Julio César Llorente López, quien fue detenido el pasado mes por agredir a un agente de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett), tiene las visitas controladas, pero “no hay limitaciones” para que sus familiares puedan verlo.
No obstante, la DGSPC aclara que el privado de libertad ofreció a las autoridades del centro un listado de las personas que quiere que lo visiten y que será a partir de este jueves que se iniciará el protocolo para que pueda recibirlas.
La información la ofreció la DGSPC en una nota de prensa enviada por la Procuraduría General.
En el mismo comunicado, José Félix Pichardo, director del Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo Hombres, de San Cristóbal, dio los detalles sobre el protocolo que se iniciaría a partir del próximo jueves.
Agregó que Llorente López se encuentra recluido en un pabellón de control del centro de Najayo Hombres, solo para resguardo de su seguridad.
La institución asegura que el privado de libertad no se encuentra aislado, como denunció su esposa Graciela González.
La DGSPC explicó que Llorente López está en la fase de «observación penitenciaria», como inicia el proceso de todo recluso cuando entra al nuevo modelo penitenciario, “periodo en el cual las visitas son controladas, sin embargo, no hay limitaciones de que sus familiares lo puedan ver”.
Julio César Llorente cumple la medida de coerción de tres meses de prisión preventiva desde el pasado 16 de agosto en el Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo Hombres, en la provincia de San Cristóbal.
El acusado de infringir la ley de tránsito, cuya violación quedó grabada por un video hecho por otro conductor, sometió un recurso para que se le varié la medida de coerción, la cual fue aplazada la pasada semana para este jueves 14. En la primera audiencia para conocerse el recurso, el imputado no fue trasladado a la corte de apelación y no se explicaron las razones.
