La Segunda Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional ordenó este jueves libertad pura y simple en favor del joven de nacionalidad cubana Julio César Llorente López, quien cumplía tres meses de cárcel en Najayo, acusado de golpear al agente de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett), José Anthony Alcántara Rojas.
Los jueces Isis Muñiz, Teófilo Andújar y Rosalba Garib, tomaron la decisión con el argumento de que el apresamiento de Llorente López fue ilegal, porque no se enmarca en un arresto en flagrante hecho, como estableció la defensa de la alegada víctima.
El tribunal consideró que la propia autoridad violó la ley al momento de realizar el apresamiento de extranjero, donde lo propio era tomar la placa del vehículo y continuar el debido proceso, el cual consiste en una orden de arresto emitida por un juez.
“Resulta lastimo ver como la propia autoridad viola la ley, al momento del apresamiento del ciudadano, tratando de montar la acción en un hecho de flagrante delito”, expresó el tribulan el la decisión de la apelación.
El representante del extranjero, el destacado abogado José Martínez Hoepelman, valoró como correcta y apegada a la ley la decisión del juzgado.
El incidente se originó cuando supuestamente el agente le fotografió los documentos al chofer, luego de aplicarle una multa por hablar por el celular mientras conducía una yipeta color blanco en la avenida Abraham Lincoln esquina Max Henríquez Ureña.
