El movimiento islamista palestino Hamás lanzó este sábado desde Gaza una ofensiva general contra Israel y aseguró que sus milicianos capturaron a ciudadanos del Estado hebreo, que replicó con bombardeos en una escalada que ya dejó cerca de 250 muertos, unos 200 de ellos en el enclave palestino.
«Estamos en guerra», declaró el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, al tiempo que ordenaba «una amplia movilización» de reservistas.
«El enemigo pagará un precio sin precedentes», prometió el mandatario en un mensaje de video, en el que reconoció que Hamás, que gobierna la Franja de Gaza, lanzó «un ataque sorpresa criminal»
Al menos 40 personas murieron en Israel, según los servicios israelíes de emergencia Magen David Adom, equivalente de la Cruz Roja. El ministerio de Salud dio cuenta de 779 heridos hospitalizados.
En la ciudad israelí de Sderot, un periodista de la AFP vio en la calle los cuerpos de al menos ocho civiles.
En Gaza, al menos 198 personas fallecieron, indicó el ministerio de Salud del enclave palestino, y más de 1.600 resultaron heridas.
El estallido de violencia se inició con una andanada de cohetes lanzados desde varios puntos de la Franja de Gaza a partir de las 06H30 (03H30 GMT) de este sábado, coincidiendo con el último día de las fiestas judías de Sucot en Israel. El brazo armado de Hamás reivindicó el ataque y aseguró que se lanzaron miles de proyectiles.
Numerosos países condenaron la ofensiva del grupo islamista, empezando por Estados Unidos, que reafirmó su compromiso «inquebrantable» con Israel y prometió asegurarse de que su aliado clave tuviera los medios para protegerse.
– «Ataque combinado» –
El ejército de Israel respondió atacando por aire objetivos de Hamás en Gaza, y se vio implicado en combates en suelo israelí, cerca del enclave palestino, contra milicianos infiltrados desde por tierra, mar y aire.
«Hubo un ataque combinado con ayuda de parapentes», indicó a la prensa el portavoz del ejército israelí, el teniente coronel Richard Hecht.
Las fuerzas armadas israelíes informaron de la activación de sirenas en el sur del país y la policía pidió a la población permanecer cerca de los refugios antiaéreos. Las sirenas fueron activadas también en Jerusalén, según periodistas de la AFP.
El brazo armado de Hamás reivindicó el disparo de proyectiles.
«Decidimos poner fin a todos los crímenes de la ocupación [israelí]; su tiempo de arrasar sin rendir cuentas terminó», declaró el movimiento islamista. «Anunciamos la operación «Diluvio de Al Aqsa’ y disparamos, en el primer ataque de 20 minutos, más de 5.000 cohetes», indicó.
El ejército israelí reportó el disparo de al menos 2.200 cohetes desde Gaza hasta las 10H30 locales (07H30 GMT).
El brazo armado de Hamás dijo por su lado haber «capturado varios soldados enemigos», en un video en el que muestra a tres hombres vestidos de civiles que habrían sido capturados.
Las Brigadas al Qods, brazo militar de la Yihad Islámica Palestina, también aseguró que había capturado a «numerosos soldados» israelíes.
El ejército israelí no hizo comentarios sobre estas declaraciones.
– «Las puertas del infierno» –
En las redes sociales, videos que no pudieron ser autentificados muestran a personas detenidas por hombres armados y los cuerpos de civiles u hombres con uniformes militares.
El general israelí Rassan Alian, al frente del órgano del ministerio de Defensa que supervisa las actividades civiles en los Territorios Palestinos, afirmó que Hamás había «abierto las puertas del infierno» y que «pagaría las consecuencias».
La operación israelí de represalias ha sido llamada «Espadas de hierro», según el ejercito.
Cientos de palestinos de la Franja de Gaza abandonaron sus casas para alejarse de zonas fronterizas con Israel. Hombres, mujeres y niños huyeron con mantas y comida, la mayoría de ellos de la parte noreste del enclave palestino, constató un periodista de la AFP.
Israel mantiene un duro bloqueo de la Franja de Gaza, un empobrecido y sobrepoblado territorio palestino, desde que en 2007 asumió allí el poder Hamás.
Estados Unidos condenó «los ataques injustificados de los terroristas de Hamás contra civiles israelíes».
La Unión Europea (UE) también condenó «sin equívocos» los ataques «de los terroristas de Hamás» y afirmó que Israel tiene «derecho a defenderse», afirmó la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
La OTAN, al igual que sus principales países miembros y Ucrania, también apoyaron el derecho del Estado hebreo a defenderse,
Rusia pidió un alto el fuego «inmediato» y Turquía instó a evitar una escalada.
Hamás se granjeó en cambio los elogios de dos enemigos jurados de Israel en la región: el movimiento chiita libanés Hezbolá, e Irán, por boca de un consejero militar del guía supremo.