Estados Unidos analizó información de inteligencia, incluidas «imágenes aéreas y comunicaciones interceptadas», y por el momento concluye que Israel no está detrás del lanzamiento del cohete a un hospital en Gaza que causó cientos de muertos, informó la Casa Blanca.
«Mientras continuamos recopilando información, nuestra evaluación actual, basada en el análisis de imágenes aéreas, comunicaciones interceptadas e información de acceso libre, es que Israel no es responsable de la explosión en el hospital de Gaza de ayer», declaró a periodistas la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional Adrienne Watson.
En su breve visita a Tel Aviv para transmitir su solidaridad a Israel después de los ataques de Hamás del 7 de octubre, Biden declaró a los periodistas: «Según la información de que disponemos hasta ahora, parece que fue provocado por un cohete fuera de control lanzado por un grupo terrorista de Gaza».
La evaluación se basó en «datos que me mostró mi departamento de Defensa», añadió.
Según el New York Times, citando a funcionarios estadounidenses, dicha información de inteligencia incluye datos satelitales e infrarrojos que muestran el lanzamiento de un proyectil desde posiciones milicianas dentro de Gaza.
Funcionarios israelíes facilitaron a Washington comunicaciones interceptadas entre responsables de Hamás, mientras que los servicios de inteligencia estadounidenses examinaron también videos de fuente abierta del lanzamiento del artefacto, aseguró el diario.
No ha habido comentarios inmediatos del Pentágono.
El grupo islamista palestino Hamás atribuyó los daños en el hospital a un ataque aéreo israelí.
El ministerio de Salud de Gaza, controlado por Hamás, aseguró que 471 palestinos han muerto en el hospital.
Israel asegura que la explosión fue provocada por un cohete fallido del grupo islamista Yihad Islámica.