Los productos que producen un cabello brillante y sin frizz emiten altos niveles de sustancias que podrían poner en peligro la salud humana, concluye una investigación publicada en noviembre, y las herramientas de peinado calientes pueden empeorar el problema.
Publicado en Environmental Science & Technology, el análisis se centró en compuestos conocidos como siloxanos. Estas sustancias suavizan, alisan y aportan brillo al cabello y son “ubicuas” en los productos para el cuidado del cabello, escriben los autores.
A pesar de su abundancia, advierten los investigadores, los siloxanos no se han estudiado adecuadamente en humanos. Los estudios en animales sugieren que los siloxanos pueden acumularse en el cuerpo y causar daños al hígado, los pulmones y el sistema nervioso, pero no está claro cómo afectan a los humanos, especialmente durante las rutinas de cuidado del cabello que generalmente se llevan a cabo en espacios reducidos e involucran herramientas de peinado calientes.
En un intento por aprender más, los investigadores realizaron experimentos en una “pequeña casa de laboratorio” equipada con un ventilador, un extractor de aire en el baño y un aire acondicionado portátil.
Durante dos meses, realizaron 46 pruebas de emisiones y reclutaron voluntarios sanos de entre 18 y 65 años para replicar sus propias rutinas de cuidado del cabello utilizando los productos y herramientas de peinado que prefieren en casa.
Mientras los voluntarios se peinaban, los investigadores controlaron las emisiones de compuestos orgánicos volátiles (COV) con un espectrómetro de masas. Las emisiones de siloxano representaron entre el 71 y el 99 % de las emisiones de COV durante los experimentos; En experimentos con alisado y rizado del cabello, los COV aumentaron cada vez que se aplicaron los productos para el cabello.
Las rutinas de cuidado del cabello con calor produjeron más emisiones de COV, y el alisado del cabello aumentó las emisiones más que cualquier otro método de peinado. Los investigadores suponen que esto probablemente se deba al contacto prolongado de la plancha con el cabello saturado y los productos recién aplicados.
Durante un experimento, los participantes se aplicaron los productos en el cabello sin calor y luego con herramientas de peinado calentadas a dos temperaturas más altas. Aunque las emisiones existían incluso sin calor, eran hasta 3,1 veces más altas en la temperatura más alta de las herramientas para alisar el cabello. Aquellos con cabello largo generaron más emisiones que aquellos con estilos más cortos.
Las emisiones generadas durante el cuidado del cabello con calor fueron “sustancialmente” más altas que las medidas en estudios anteriores que analizaron otros productos de cuidado personal como champús diseñados para lavarse, escriben los investigadores.
Aunque tener el ventilador del baño encendido durante la rutina de cuidado del cabello ayudó a reducir significativamente la exposición, dicen, las dosis de exposición al siloxano aún eran altas.
“Se necesitan urgentemente estudios sobre el impacto a largo plazo de la exposición al siloxano en la salud humana”, concluyen.
Los productos también pueden afectar la atmósfera en áreas urbanas, escriben, contribuyendo con hasta seis toneladas de dichas emisiones a la atmósfera cada año en los Estados Unidos.