Panamá negó este viernes el salvoconducto de salida del país al expresidente Ricardo Martinelli, a quien Nicaragua otorgó asilo hace dos días luego de que fuera condenado a casi 11 años de cárcel por blanqueo de capitales.
Martinelli (2009-2014) solicitó asilo en la embajada de Nicaragua en Panamá luego de perder la semana pasada su último recurso ante la justicia panameña para evitar ir a prisión, y el gobierno del presidente Daniel Ortega se lo concedió de inmediato.
«La solicitud de salvoconducto para la salida del territorio de la República de Panamá al señor Ricardo Alberto Martinelli Berrocal ha sido denegada», dijo la cancillería panameña en un comunicado.
Ortega ha concedido asilo a otros expresidentes y altos funcionarios centroamericanos que enfrentan problemas con la justicia, entre ellos los exmandatarios izquierdistas salvadoreños Mauricio Funes (2009-2014) y Salvador Sánchez Cerén (2014-2019).
La cancillería panameña dijo además que recordó en una nota a Nicaragua que, en virtud de las convenciones diplomáticas, es «incompatible» que Martinelli realice en la embajada nicaragüense en la capital panameña cualquier actividad política que «repercuta e impacte en la política doméstica de Panamá», debido a que el exmandatario derechista ha ofrecido entrevistas de prensa y recibido a aliados políticos en la legación.
Martinelli había iniciado el pasado sábado su campaña a las elecciones presidenciales del 5 de mayo, un día después que la Corte Suprema publicara el fallo que rechazaba su último recurso.
Luego del fallo de la máxima corte, el Tribunal Electoral debe formalizar su marginación de la contienda presidencial y la justicia debe ordenar su detención para que cumpla condena.
Martinelli pidió asilo «en razón del peligro inminente a su vida», según su portavoz, Luis Eduardo Camacho.
«Lo querían meter preso para matarlo», afirmó por su parte la abogada Shirley Castañeda, del equipo de defensa del exmandatario.
Martinelli, de 71 años, fue condenado en julio pasado a 128 meses de prisión y a pagar una multa de 19 millones de dólares por blanqueo de capitales.
El fallo de primera instancia fue ratificado en octubre por un tribunal de apelaciones, luego de lo cual Martinelli presentó un último recurso de casación para intentar anular la sentencia.
Desde entonces el expresidente y dueño de una cadena de supermercados presentó sucesivos recursos de amparo, en un aparente intento de dilatar el fallo definitivo de la Corte Suprema hasta después de los comicios, pero todos fueron rechazados.
– «Decisión personalísima» –
A pesar de sus líos judiciales, Martinelli era hasta ahora muy popular en Panamá, según las encuestas. Otros postulantes a los comicios de mayo son el exmandatario Martín Torrijos (2004-2009) y el actual vicepresidente José Gabriel Carrizo, ambos socialdemócratas.
Martinelli es líder del partido Realizando Metas (RM, las iniciales de su nombre), cuyo candidato a vicepresidente es su exministro de Seguridad Pública José Raúl Mulino.
«Ricardo Martinelli tomó una decisión personalísima, no nos consultó», adoptó una «difícil decisión» para protegerse, dijo Mulino en una rueda de prensa, agregando que asumirá la candidatura presidencial que encabezaba el exmandatario.
Martinelli calificó el fallo de la Corte Suprema como una «jugada salvaje e ilegal de último momento» para sacarlo de la carrera electoral dictado por «magistrados de pacotilla».
Además, pidió a sus seguidores que apoyaran a Mulino si era inhabilitado como candidato.
– «New Business» –
El expresidente fue juzgado por comprar en 2010, mientras era presidente, la mayoría de las acciones de Editora Panamá América con dinero proveniente del cobro de comisiones en obras de infraestructura.
Para esa adquisición se utilizó una parte de los 43,9 millones de dólares que distintas empresas depositaron en un complejo esquema de sociedades provenientes del pago de sobornos, hasta un 10% del monto de los contratos originales en obras públicas, según la justicia.
Este caso es conocido como «New Business» por el nombre de una de las sociedades utilizadas en la trama.
Asimismo, el expresidente debe enfrentar otro juicio en julio por el supuesto blanqueo de sobornos pagados por la constructora brasileña Odebrecht.
Dos hijos del exmandatario, Ricardo y Luis Enrique Martinelli, cumplieron dos años y medio de prisión en Estados Unidos por el cobro de comisiones a Odebrecht.