Joe Biden afirmó este viernes que el presidente ruso Vladimir Putin y sus «matones» son responsables de la muerte en prisión del opositor ruso Alexéi Navalni.
«No sabemos exactamente qué ocurrió» pero en última instancia es culpa de Putin y sus «matones», declaró el presidente estadounidense, que reconoció estar «escandalizado».
«No se equivoquen, Putin es responsable de la muerte de Navalni. Putin es responsable», recalcó durante un discurso en la Casa Blanca.
«Lo que le ha ocurrido a Navalni es una prueba más de la brutalidad de Putin. Nadie debe dejarse engañar», añadió.
Biden dijo que está «examinando opciones» sobre cómo responder, pero no fue más allá.
Consultado en 2021, tras reunirse con el presidente Putin en Suiza, sobre qué pasaría si Navalni muriera, Biden declaró: «Le dejé claro que creo que las consecuencias de eso serían devastadoras para Rusia».
El presidente estadounidense transmitió su pésame a la esposa e hijos del opositor al Kremlin.
Navalni era «muchas cosas que Putin no es», dijo. Para el mandatario, era un defensor de la verdad.
«Incluso en prisión fue una poderosa voz para la verdad», aseguró. «Dios bendiga a Alexéi Navalni, su valentía no será olvidada».
Las autoridades rusas informaron que Navalni murió el viernes en una prisión del Ártico, un mes antes de unas elecciones que podrían prolongar la hegemonía de Putin en el poder.
La muerte de Navalni, después de tres años detenido y un envenenamiento del que culpó al Kremlin, priva a la oposición rusa de su cabeza visible en un momento de intensa represión y de campaña militar de Moscú en Ucrania.
El demócrata estimó que la muerte de Navalni recuerda la necesidad de que los republicanos de la Cámara de Representantes de Estados Unidos dejen de bloquear un paquete de ayuda a Ucrania, en guerra tras ser invadida por Rusia hace casi dos años.
«Esta tragedia nos recuerda lo que está en juego en este momento», sostuvo Biden. «Tenemos que proporcionar la financiación para que Ucrania pueda seguir defendiéndose del ataque violento de Putin y de sus crímenes de guerra».
En su intervención restó importancia a las preocupaciones sobre un arma antisatélite que, según la Casa Blanca, está desarrollando Rusia.
No supone «ninguna amenaza nuclear» para Estados Unidos ni para ningún otro país, afirmó el presidente.
Biden también prometió que Washington cumpliría su «sagrado compromiso» con la OTAN, en un momento en el que los aliados temen un cambio de posición si el republicano Donald Trump ganara las presidenciales de noviembre.
Calificó de nuevo de «peligrosas» las declaraciones de Trump, que anima a Rusia a atacar a los países de la OTAN si incumplen sus compromisos financieros.
«Desde Truman en adelante, se están retorciendo en sus tumbas al oír esto», dijo Biden, refiriéndose al presidente Harry Truman, que hizo que Estados Unidos fuera miembro fundador de la alianza en 1949.