El reelegido presidente de El Salvador, Nayib Bukele, que también controla el Congreso, ganó el último eslabón del poder al obtener con aliados 43 de los 44 concejos municipales, en los comicios celebrados el domingo, con una baja participación de electores.
En la contienda, el oficialista Nuevas Ideas y «los partidos que apoyan nuestro proyecto: 43 de 44», aseguró Bukele en la redo social X.
Así como ocurrió con los comicios generales del 4 de febrero, Bukele se atribuyó la victoria antes de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) se pronunciara sobre los resultados de estas votaciones.
El TSE comenzó a presentar datos preliminares de la contienda la noche de este domingo.
Nuevas Ideas gobernará la mayoría de las 14 cabeceras departamentales, incluyendo la capital San Salvador, donde el alcalde Mario Durán, de 40 años, fue reelecto.
«Gracias al pueblo salvadoreño por seguirme dando la oportunidad de servirles. Aceptamos con humildad esta victoria», consignó Durán en X.
«Las elecciones se han desarrollado en completa normalidad, sin dificultades, en un ambiente de paz», declaró la presidenta del TSE, Dora Esmeralda Martínez, momentos antes del cierre de los centros de votación.
A la contienda fueron convocados 6,2 millones de electores, pero fue considerada como un mero «trámite» tras el arrollador triunfo de Bukele en los comicios generales del 4 de febrero, en los que su partido Nuevas Ideas además ganó 54 de los 60 escaños en el Congreso.
– Pueblo sabio –
Para Bukele, «el pueblo es sabio» y algunos de los nuevos alcaldes pertenecen a partidos que siempre han estado para apoyar «todos los cambios» que el país ha necesitado, desde antes de ganar la presidencia en 2019.
«En El Salvador vivimos en una democracia y la decisión del pueblo se respeta. Está claro que en muchos municipios la gente ha votó por alcaldes que no son de Nuevas Ideas; esto es el voto de castigo a las pésimas gestiones que algunos de ellos han realizado», aseguró el mandatario.
Una hora antes del cierre, Bukele acudió a sufragar junto a su esposa Gabriela Rodríguez a las urnas instaladas en la avenida Olímpica, en San Salvador, donde los presentes coreaban «viva Nayib».
Con 90% de los escaños del Congreso ganados, Bukele cuenta con los votos suficientes para aprobar sin problema cualquier proyecto de ley, elegir magistrados de la Corte Suprema y al fiscal general, y mantener el régimen de excepción con el que combate a las pandillas desde hace dos años.
Beneficiado por su cruzada contra las pandillas, Bukele fue reelegido con un contundente 84,65% de los votos, según el escrutinio oficial.
Su alta popularidad es resultado de la lucha contra la criminalidad, que acumula más de 75.000 detenidos y ha devuelto la paz a las calles del país.
A pesar de que su cruzada contra las pandillas es cuestionada por organismos humanitarios, favoreció a su partido Nuevas Ideas en estos comicios, en los que además se eligen 20 diputados al Parlamento Centroamericano.
Los resultados de este domingo «terminarán de confirmar la concentración de poder» de Bukele, lo cual «implicaría mayor debilitamiento de la oposición» de izquierda y de derecha, vaticina el director de investigaciones de opinión pública de la Universidad Francisco Gavidia (UFG), Óscar Picardo.
En junio de 2023, el Congreso redujo de 262 a 44 los municipios, reforma que beneficiaría al oficialismo.
– Baja participación –
«Hasta ahora ha habido una participación un poco baja», declaró a la prensa la jefa de la misión de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA), Isabel de Saint Malo, en su primera valoración del proceso.
La ausencia de electores se debe «en primer lugar al mal manejo de la elección pasada» de presidente y diputados en febrero, la cual estuvo cargada de irregularidades, consideró el médico Kevin Cuéllar, de 42 años, tras votar en San Salvador.
Según datos del Tribunal Supremo Electoral, la participación en las dos últimas elecciones municipales y legislativas fue de 53,39% en 2021 y 53,29% en 2018.
– «Enfoque centralizador» –
La campaña se centró «en la figura presidencial [de Bukele], que es la que genera la atracción de los electores», destacó a la AFP el director de la ONG Iniciativa Social para la Democracia, Ramón Villalta.
Con la nueva distribución de municipios, «la tendencia es a fortalecer más un enfoque centralizador, a disminuir la autonomía municipal, a volver más dependiente a las municipalidades» del gobierno central, resume el analista.
Villalta recordó, además, que en los últimos cuatro años los municipios «se han visto afectados» por la disminución de transferencias de fondos del gobierno central, que pasó a controlar los presupuestos para obras locales.