La temporada 21 de LeBron James en la NBA llegó a su fin el lunes con una dolorosa derrota de Los Angeles Lakers 108-106 ante los Denver Nuggets en la primera ronda de playoffs, tras la que mantuvo la incertidumbre sobre su futuro a sus 39 años.
Una canasta en los últimos segundos de Jamal Murray selló la victoria y la clasificación de los vigentes campeones por un global de 4-1.
Los Nuggets ya habían barrido un año atrás 4-0 a los Lakers en las Finales de la Conferencia Oeste, en una noche en que LeBron dejó entrever que valoraba la retirada.
Esta vez el máximo anotador histórico de la NBA no hizo esa insinuación pero tampoco quiso hablar de su continuidad con la franquicia oro y púrpura.
«No voy a contestar a eso», dijo el alero con una sonrisa sobre la posibilidad de que fuera su último partido con los Lakers.
En 44 minutos en pista, LeBron sumó 30 puntos, 9 rebotes y 11 asistencias en su lucha por evitar la segunda derrota en primera ronda de sus 17 participaciones en playoffs.
James lidera desde 2018 a los Lakers, franquicia con la que conquistó el cuarto anillo de su carrera en 2020 y la primera Copa de la NBA el pasado diciembre. En este momento tiene la opción de extender su contrato con el equipo por una campaña más por 51 millones de dólares pero también de convertirse en agente libre y firmar por otra franquicia.
«Ahora mismo sólo quiero volver a casa con la familia, honestamente (…) Voy a descansar mi cuerpo para el equipo de Estados Unidos», afirmó LeBron, comprometido a jugar con el nuevo ‘Dream Team’ en los Juegos Olímpicos de París (26 de julio – 11 de agosto).
El alero también relativizó su objetivo declarado de jugar en la NBA junto a su hijo Bronny, quien podría presentarse al Draft de junio después de un duro año en el básquet universitario
«No he pensado mucho en ello últimamente. Obviamente, lo pensé en el pasado, pero al final el chico tiene que hacer lo que quiera. Él decidirá lo que quiere hacer y cómo quiere que vaya su carrera», zanjó James.
Según The Athletic, los Lakers están abiertos a seleccionar a Bronny James para que pueda jugar junto a su padre.
«Han sido cinco grandes temporadas juntos. Si (LeBron) decide volver, no es aquí donde queremos estar. Queremos ser un aspirante al campeonato», declaró Anthony Davis, la otra figura angelina.
– Letal Murray –
Después de tres derrotas iniciales en la serie, los Lakers tenían la misión casi imposible de ser los primeros en remontar un 3-0 en contra en toda la historia de los playoffs.
El pasado sábado el equipo angelino recortó la ventaja frente a su público, rompiendo a su vez una racha de 11 derrotas seguidas ante los Nuggets.
A base de orgullo, los Lakers se mantuvieron todo el juego igualados en el marcador y forzaron un final de infarto en el que James empató el partido con dos tiros libres a 26 segundos del final.
En la posesión decisiva, Jamal Murray sentenció el triunfo y la clasificación de los Nuggets con un letal tiro en suspensión a cuatro segundos del final.
«Estos son los tiros con los que sueñas de pequeño y practicas en tu patio trasero», afirmó..
El base canadiense, que ya había firmado otro tiro ganador en el segundo partido, terminó con 32 puntos en un juego para el que fue duda hasta último momento por un problema de gemelos.
«Lograr dos tiros ganadores en una serie es simplemente increíble. El chico es un guerrero», le reconoció el técnico Michael Malone.
La estrella de Denver, el serbio Nikola Jokic, bordeó un descomunal triple doble con 25 puntos, 20 rebotes y 9 asistencias.
Los Nuggets seguirán su defensa del anillo de campeones enfrentando a los Minnesota Timberwolves en las semifinales del Oeste.
– Los Thunder avanzan –
En otro de los partidos del lunes, los Oklahoma City Thunder, primer sembrado del Oeste, completaron la barrida 4-0 ante los New Orleans Pelicans con un triunfo por 97-89.
El equipo que dirige Mark Daigneault, el Entrenador del Año en la NBA, jugará las semifinales del Oeste por primera vez desde 2016 frente a Los Angeles Clippers o los Dallas Mavericks, cuya llave está empatada 2-2.
De su lado los Boston Celtics, líder del Este, se colocaron a un paso de la clasificación al batir 102-88 a los Miami Heat y adelantarse 3-1 en el global.
La nota negativa de la victoria, a la que asistió Lionel Messi en la grada de Miami, fue la lesión de gemelos de Kristaps Porzingis que requerirá de exámenes adicionales.