El Gobierno español criticó este martes la denuncia, a su juicio falsa, que presentó un colectivo cercano a la extrema derecha y que llevó a un tribunal a abrir una investigación preliminar al hermano del presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez.
Esta misma organización, Manos Limpias, interpuso otra denuncia en el origen de las pesquisas judiciales contra Begoña Gómez, la esposa del mandatario socialista.
«De nuevo, Manos Limpias, que es lo mismo que decir que otra vez estamos delante de una denuncia falsa, construida otra vez a través de recortes y retazos de tabloides digitales», declaró la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, en rueda de prensa al ser preguntada por el caso del hermano de Sánchez.
Contactado por AFP, un tribunal de Badajoz, en el suroeste del país, confirmó la investigación contra el presidente socialista de la Diputación (Gobierno provincial) de Badajoz y dos empleados de esa institución, sin especificar el nombre.
Las tres personas son sospechosas de malversación, tráfico de influencias y prevaricación.
Según la prensa local, Manos Limpias denunció a David Sánchez, quien es responsable de la oficina de Artes Escénicas de la Diputación de Badajoz, por presuntamente percibir un sueldo público sin acudir debidamente a su trabajo.
Tras una denuncia anterior de Manos Limpias, un juzgado de Madrid decidió abrir una investigación por presunta corrupción y tráfico de influencias contra la esposa de Sánchez a finales de abril.
Manos Limpias reconoció que su querella se basó únicamente en artículos de prensa.
Al conocerse la noticia, Sánchez -que afirma que todo se trata de un «zafio montaje»-, llegó a anunciar que consideraba renunciar, algo que finalmente no hizo.
El caso se centra en el presunto apoyo de Gómez, a través de cartas de recomendación, a un empresario que ganó licitaciones públicas por valor de 10 millones de euros.
La esposa de Sánchez fue citada a declarar como investigada a comienzos de julio.