La nueva cédula será una tarjeta de polímero termoplástico (policarbonato) de gran resistencia, formada por varias capas (mínimo 5) fusionadas mediante laminación en caliente resistente a la división con tintas de formulación específicas para el sistema de impresión offset.

Las tintas de seguridad contarán con pigmento sólido ópticamente variables, elemento holográfico de borde a borde. Todas las tintas deberán cumplir la normativa de durabilidad (ISO 18745) y deberán tener una solidez a la luz de 4 en la escala de las lanas azules.



Las cédulas tendrán diseño exclusivo de los fondos de seguridad a imprimir en offset, contemplando guilloches, microtextos combinados con motivos o imágenes alegóricas a la República Dominicana constituidos a partir de líneas finas continuas con modulación de su espesor u otras tramas de alta seguridad.

Los impresos deberán hacerse en al menos dos colores de tinta visible, también tendrán que presentar fluorescencia en el anverso al menos ante la exposición de una fuente de luz ultravioleta y embozados superficiales en relieve mediante laminación a registro.



Indica Wilder Páez que esta deberá contar con estructura lenticular para poder personalizar un CLI o MLI, ventana transparente a definir su forma y posición en la tarjeta para imprimir medidas de seguridad que contenga la solución como es la fotografía y la fecha de caducidad de la cédula. También, el chip ha de ser sin contacto, con funcionalidad de documento de viaje electrónico.

La Junta suscribió un acuerdo con la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), agencia especializada de Naciones Unidas, que entre otras funciones se encarga de la normalización de las especificaciones técnicas de cédulas y pasaportes en todo el mundo. Todos los datos de la cédula se guardarán a color y se imprimirán en equipos robotizados en un único centro a funcionar en el país.