El presidente de Kenia, William Ruto, anunció el miércoles el retiro de un proyecto legislativo de aumento de impuestos que desencadenó violentas protestas en las cuales murieron el martes más de 20 personas.
«Tras escuchar atentamente al pueblo de Kenia (…), desisto y no firmaré el proyecto de ley de finanzas de 2024, que por lo tanto será retirado», anunció Ruto en una rueda de prensa. «El pueblo ha hablado, agregó.
Una periodista que destacó como figura de la ola de contestación, Hanifa Adam, consideró en la red social X que el anuncio de Ruto era una mera «operación de comunicación».
«Se retira el proyecto de ley, ¿pero nos devolverá la vida de todos los que murieron?», preguntó Adam, que poco antes había convocado a nuevas concentraciones el jueves.
Al menos 22 personas murieron el martes en las protestas, indicó la agencia de derechos humanos de este país de África oriental.
Los manifestantes forzaron los cordones policiales en Nairobi, la capital, y penetraron al recinto del Parlamento, un hecho sin precedentes desde la independencia en 1963 de esta excolonia británica.
También se registraron saqueos e incendios de edificios en Nairobi y otras ciudades.
El gobierno ordenó el despliegue del ejército y el presidente Ruto prometió por la noche reprimir «la violencia y la anarquía».
Se trataba de la tercera jornada en ocho días del movimiento «Occupy Parliament» («Ocupar el Parlamento»), surgido en las redes sociales, después de la presentación el 13 de junio del proyecto de los presupuestos 2024-2025 que preveía instaurar nuevos impuestos como un IVA del 16% al pan y una tasa anual del 2,5% a los vehículos particulares.
El gobierno alegaba que esas tasas eran necesarias para dar margen de maniobra al país, muy endeudado.
El 18 de junio anunció la retirada de la mayoría de las medidas, pero el movimiento exigió la eliminación total del texto.