El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, asistió el sábado a tres actos de recaudación de fondos de campaña, buscando asegurar a los donantes más pudientes que aún puede lograr la reelección a pesar de su caótica actuación en un debate contra su predecesor Donald Trump.
«No tuve una gran noche, pero Trump tampoco», evaluó el mandatario en uno de los mítines del sábado en Nueva York y Nueva Jersey, donde estuvo acompañado de su esposa, Jill Biden, quien lo defendió ferozmente frente a los llamados para que dé un paso al costado.
«Joe no es sólo la persona adecuada para el cargo; es la única persona para el cargo», aseguró.
El presidente de 81 años se enfrenta a una ola de dudas tras el debate del jueves por la noche contra su rival republicano, donde titubeó, dejó frases inacabadas y pareció perder el hilo de su pensamiento, exacerbando los temores sobre su edad y agudeza mental.
Muchos comentaristas políticos pidieron que Biden dimitiera tras ese evento, incluido el consejo editorial del New York Times, el periódico más influyente de Estados Unidos. Mientras tanto, el consejo editorial del Washington Post lo instó a hacer un examen de conciencia durante el fin de semana después de que su «calamitosa» actuación en el debate planteara «dudas legítimas sobre si está preparado para otros cuatro años en el trabajo más duro del mundo».
Ningún demócrata electo de alto rango se ha sumado todavía al llamado, y los expresidentes Barack Obama y Bill Clinton le reiteraron públicamente su respaldo el viernes.
Jennifer O’Malley Dillon, presidenta de la campaña de Biden, dijo en un memorando público el sábado que las encuestas internas posteriores al debate mostraron que «las opiniones de los votantes no cambiaron». E incluso aseguró que hubo un aumento del apoyo, con 27 millones de dólares recaudados el viernes por la noche.
«Entiendo la preocupación después del debate», dijo el mandatario en un mítin de Nueva Jersey junto al gobernador demócrata del estado, Phil Murphy.
«Lo entiendo. No tuve una gran noche, pero voy a luchar más duro», prometió.