Cuando se piensa en grandes conciertos, inevitablemente vienen a la cabeza imágenes que ya forman parte de la historia de la música, como el festival de Woodstock de 1969, en plena eclosión del movimiento hippie, cuando casi medio millón de personas disfrutaron de los recitales de Jimi Hendrix, The Who, Joe Cocker, Creedence Clearwater Revival, Janis Joplin, Santana o Neil Young, entre otros, o la inolvidable actuación de Queen en el Live Aid de Wembley de 1985, considerada por muchos como una de las mejores de la historia.
Por muy memorables y multitudinarios que fueran ambos conciertos, ninguno de los dos figura entre los más masivos de todos los tiempos.
Detalla Dani Cabezas que para encontrarlos hay que irse a otros lugares como la exótica playa de Copacabana, en Río de Janeiro, la siempre inspiradora París o incluso la gigantesca capital rusa, Moscú. He aquí los cinco que congregaron a más gente. ¿Se superarán algún día?
Garth Brooks en Central Park (Nueva York), 1997. 700.000 personas
A este lado del Atlántico, Garth Brooks es una figura reconocida y autor de un buen puñado de éxitos que no faltan en cualquier recopilación de country. Pero en su país natal es una celebridad de tamaño gigantesco.
No en vano, se trata del artista en solitario que más discos ha vendido en toda la historia, por delante incluso de Elvis Presley. Quizá por ello su actuación en el emblemático Central Park neoyorquino en 1997 fue uno de los acontecimientos del año. Allí se dieron cita más de 700.000 personas, de las que –imaginamos– muchas sólo alcanzaron a distinguir de lejos su icónico sombrero.
The Rolling Stones en Copacabana (Rio de Janeiro), 2006. 2 millones de personas
Encontrar un lugar para plantar la sombrilla en una playa tan cotizada como Copacabana, en Río de Janeiro, puede ser una tarea compleja. Pero eso no es nada comparado con lo que tuvo que costar hacerse un hueco para ver a sus Satánicas Majestades cuando decidieron actuar allí de manera gratuita en 2006.
Como en el resto de eventos, resulta casi imposible determinar el número exacto de personas que asistieron a la cita: algunos medios hablaron de un millón. Otros elevaron la cifra hasta más allá de los dos millones. Sea como fuere, las imágenes hablan por sí solas.
Jean-Michel Jarre en París (1990) 2,5 millones de personas
Los franceses son, ante todo y por encima de todo, muy franceses. Por eso, para celebrar los 200 años de la Revolución que sirvió de inspiración al mundo entero en 1789, el país galo quiso sorprender al mundo con un espectáculo como pocos que se hubieran visto hasta aquel momento.
La Defense parisina, el corazón financiero de la capital, acogió un concierto masivo del compositor e intérprete de música electrónica Jean-Michel Jarre. Durante años, este sería el concierto con más asistentes de la historia. Hoy en día sigue sorprendiendo por lo grandilocuente de la propuesta a todos los niveles.
Rod Stewart en Rio de Janeiro (1994). 3,5 millones de personas
https://youtu.be/2anvX7wW_WA
A sus 79 años, Rod Stewart sigue demostrando estar en plena forma cada vez que se sube a un escenario. En 1994, el rockero británico vivía un momento dulce tras ser incluido en el Salón de la Fama del Rock and Roll.
Un año que había inaugurado a lo grande: celebrando la Nochevieja en la icónica playa brasileña de Copacabana. ‘Do Ya Think I’m Sexy’, ‘Sailing’, ‘Maggie May’… No faltaron ninguno de sus numerosos éxitos. Y sí: a los Rolling les debió dar pelusilla, y de ahí que repitieran el plan 12 años después, aunque con algo menos de asistencia. Existe un debate sobre si este fue o no el concierto más multitudinario de la historia. ¿Y si lo dejamos en empate con el siguiente?
Jean-Michel Jarre en Moscú (1997) 3,5 millones de personas
En 1997, seis años después de la caída de la Unión Soviética, Rusia vivía un momento complejo. Su líder, Boris Yeltsin, estaba enfermo del corazón. Pero su delicada salud no le había impedido llevar a cabo una masiva campaña de privatizaciones: el país entero parecía estar en venta, y casi cualquier cosa, por excesiva que fuera, parecía posible.
Había que celebrar el 850 aniversario de la capital y, una vez más, por allí estaba el francés Jean-Michel Jarre para volver a batir un récord: 3,5 millones de personas le vieron actuar frente a la entrada principal del rascacielos estalinista de la Universidad Estatal Lomonósov, sobre cuyo escenario interpretó su espectáculo ‘Oxygen’. Se dice que en algunos momentos se alcanzaron picos de 5 millones de personas viendo el concierto. Medio Moscú estaba allí. Literalmente.