Más de 2.600 aviones Boeing 737 tendrán que ser inspeccionados «inmediatamente», debido a la preocupación de que las máscaras de oxígeno de los pasajeros pueden fallar en caso de emergencia, anunció este lunes el regulador aeronáutico estadounidense (FAA).

Según la FAA, esta inspección debe llevarse a cabo «en un plazo de 120 a 150 días» en «ciertos aviones Boeing 737-8, 9, -8200, -700, -800 y -900ER», es decir las generaciones antiguas y nuevas.



Unos 2.612 aviones van a ser inspeccionadas, informa la FAA, que no ha ordenado la inmovilización en tierra de las aeronaves afectadas.

Se trata de garantizar que las máscaras de oxígeno a disposición de los pasajeros en caso de despresurización de la cabina durante un vuelo se hallan en la posición correcta.



Varios informes citados por el regulador indican que los equipos situados encima de los asientos con iluminación y ventilación, desde los que salen las máscaras de oxígeno en caso de emergencia, se han desplazado debido a un «fallo de enganche».

Contactado por la AFP, el fabricante estadounidense no respondió a la consulta.

Es el último anuncio de una serie de problemas a los que se enfrenta Boeing.

El lunes la compañía afirmó haber alcanzado un acuerdo con el Departamento de Justicia estadounidense en el caso penal por los accidentes de dos aviones 737 MAX en 2018 y 2019 en los que murieron 346 personas.