Una entrevista de trabajo es una oportunidad crucial para causar una buena impresión y acercarte a tu objetivo profesional.

A continuación, se presentan diez errores comunes que debes evitar para maximizar tus posibilidades de éxito.



  1. Llegar tarde

Llegar tarde a una entrevista da la impresión de falta de respeto y de mala gestión del tiempo. Siempre planifica llegar al menos 10-15 minutos antes para asegurarte de tener tiempo suficiente para acomodarte y relajarte antes de la entrevista.

  1. No investigar sobre la empresa

Ir a una entrevista sin haber investigado sobre la empresa demuestra desinterés y falta de preparación. Conocer la misión, visión, productos y cultura de la empresa te permitirá responder mejor a las preguntas y mostrar tu entusiasmo por el puesto.



  1. Vestir inapropiadamente

Tu apariencia dice mucho sobre ti. Vestir de manera inapropiada puede dar una mala impresión. Opta por una vestimenta profesional que sea adecuada para la cultura de la empresa a la que estás postulando.

  1. No llevar copias de tu currículum

Aunque hayas enviado tu currículum por adelantado, siempre lleva copias adicionales a la entrevista. Esto muestra que estás preparado y puede ser útil si el entrevistador no tiene una copia a mano.

  1. Hablar mal de empleadores anteriores

Hablar negativamente sobre empleadores o compañeros de trabajo anteriores refleja mal en ti, no en ellos. Mantén una actitud profesional y positiva, y enfócate en lo que has aprendido de tus experiencias pasadas.

  1. No hacer preguntas

Una entrevista es una conversación de dos vías. No hacer preguntas puede parecer que no estás realmente interesado en el puesto o en la empresa. Prepara algunas preguntas relevantes sobre el rol, el equipo o la cultura de la empresa.

  1. Usar un lenguaje corporal negativo

El lenguaje corporal juega un papel crucial en la comunicación. Evita cruzar los brazos, mirar constantemente el reloj o evitar el contacto visual. Mantén una postura abierta y positiva para mostrar confianza y compromiso.

  1. Interrumpir al entrevistador

Interrumpir al entrevistador es una señal de falta de respeto y de habilidades de comunicación deficientes. Escucha atentamente y espera a que terminen de hablar antes de responder.

  1. No ser honesto

Ser deshonesto sobre tus habilidades, experiencia o cualquier otro aspecto de tu currículum puede salir a la luz más adelante y dañar tu reputación. Siempre es mejor ser honesto y transparente.

  1. Olvidar agradecer

Agradecer al entrevistador por su tiempo y consideración al final de la entrevista es una cortesía básica que muchos olvidan. Un agradecimiento sincero puede dejar una impresión positiva duradera.