El doctor Wilson Gómez Ramírez, presidente del Instituto Duartiano, atribuyó la “Invasión del Vientre”, a través de las parturientas haitianas desde Haití, al descuido de las autoridades dominicanas.
“Nosotros, los dominicanos, hemos caído en una situación muy difícil como consecuencia de descuido sistemático que han producido los gobiernos que hemos tenido en los últimos tiempos”, manifestó el exmagistrado del Tribunal Constitucional.
Gómez Ramírez sostuvo que el territorio dominicano, desde el año 1968, se iniciaron esfuerzos de planificación familiar a pesar de que había menos población que en Haití.
“Aunque esta parte de la isla (República Dominicana) tenía mucho menos habitantes que Haití, que tenía una densidad poblacional más alta y una limitación mayor, sin embargo, la limitación se impuso a la República Dominicana, no así a Haití. Eso tenía un propósito, a menos población en una parte de la isla y a más población, descontrolada en extremo, en la otra parte, eso iba a crear la situación que estamos sufriendo hoy”, declaró el jurista.
Dijo que la República Dominicana no puede permitir que esta situación continúe y alertó a las autoridades dominicanas que es necesario disponer de las medidas pertinentes.
Sostuvo que este país se ha convertido en un paritorio, “con caravanas de parturientas que vienen desde Haití a parir”, porque las autoridades no han tomado las medidas necesarias.
Asimismo, Wilson Gómez aseguró que la mayoría de esas mujeres son traídas a parir a los hospitales dominicanos desde territorio haitiano.
“El incentivo ha debido quitarse. Hay un incentivo, independientemente de que uno sabe que hay acciones que se ponen en práctica y que se pondrían de cualquier manera porque recursos no faltan. Nosotros no hemos tomado medidas, por ejemplo: Si Haití y sus hospitales, a sus nacionales, le tiene tarifas en los centros hospitalarios, ¿por qué la República Dominicana no establece tarifa para los extranjeros en los centros hospitalarios?”, apuntó.
Consideró que establecer tarifas en los hospitales dominicanos para los extranjeros es una medida que no es discriminatoria, ya que en Haití cobran en los centros hospitalarios.
Gómez Ramírez dijo que a las parturientas dominicanas le exigen cosas en los hospitales públicos que no le requieren a las haitianas.
Calificó como un problema para la República Dominicana el desbordamiento de nacimientos de niños hijos de haitianas, quienes son asentados en el Libro de Extranjería, ya que va a decir nacionalidad haitiana, “pero nació aquí”.
Sostuvo que los consulados tienen facultades de actuar como Registro Civil u oficiales del Estado Civil y que Haití tiene en territorio dominicano consulados en Barahona, en Santiago, Santo Domingo y en algunos puntos fronterizos, donde ellos pueden recibir las declaraciones de nacimientos de los haitianos para que sean inscritos en los libros de Registro Civil de ese país.
Dijo que a la República Dominicana no le corresponde dotar de documento a ningún extranjero, ya que la expedición de un documento que determina el nacimiento y nacionalidad de una persona es atinente al ejercicio de la soberanía de cada país.
El presidente del Instituto Duartiano se refirió a la migración masiva haitiana y lo que está haciendo esa entidad para preservar el legado del patricio Juan Pablo Duarte y despertar la conciencia nacional durante una entrevista con el periodista José Peguero, CEO del periódico Ensegundos.do.
