Los líderes de dos bandas criminales firmaron una tregua para poner fin al conflicto armado en la mayor barriada de Haití, azotado por una escalada de la violencia desde febrero, dijo el jueves un portavoz comunitario.
Bajo el acuerdo entre los grupos G9 y G-Pep, se retirarán los bloqueos en el barrio de chabolas Cite Soleil, de unos 300.000 habitantes, dijo el pastor Jean Enock Joseph, influyente figura en la comunidad.
«Se ha alcanzado una nueva fase», declaró Joseph a la AFP.
Según el pastor, una tregua similar se firmó en julio de 2023, pero fracasó pocas semanas después.
Golpeado por la violencia de bandas criminales hace muchos años, Haití vive una escalada desde finales de febrero, cuando grupos armados lanzaron un ataque coordinado en la capital Puerto Príncipe para derrocar al entonces primer ministro Ariel Henry.
Las bandas criminales controlan el 80% de las vías en el país caribeño y son responsabilizadas de cometer asesinatos, violaciones, saqueos y secuestros.
Como en gran parte de Puerto Príncipe, los residentes de Cite Soleil estaban impedidos de transitar libremente entre las zonas controladas por las bandas rivales por temor a ser víctimas del fuego cruzado.
Las bandas G9 y G-Pep no se han enfrentado desde febrero, cuando se aliaron a otras agrupaciones criminales para realizar ataques coordinados y derribar a Henry. Pero mantenían sus divisiones en Cite de Soleil hasta el miércoles.
Jimmy «Barbecue» Cherizier, líder de G9 y dirigente de la coalición de pandillas, resaltó el valor de los líderes de las bandas de Cite Soleil el jueves.
El aumento de la violencia en Puerto Príncipe en los últimos meses también ahondó la crisis humanitaria, con cerca de 600.000 desplazados internos tras un aumento del 60% desde marzo, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Desde la renuncia de Henry, se nombraron autoridades interinas para retomar el control del país, con el apoyo de una misión respaldada por la ONU y liderada por Kenia.
Más de 400 policías kenianos llegaron al país desde el 25 de junio para reestablecer la seguridad en Haití. El país africano se comprometió a enviar a 1.000 uniformados en el marco de la misión.
La tarea es desafiante en un país golpeado además por la corrupción y que está sin presidente electo desde el asesinato de Jovenel Moise en 2021.