Once provincias tienen la mayor notificación de casos de tuberculosis en el país, enfermedad infecciosa que sigue siendo un problema de salud pública y un desafío para los países.

Durante 2023, en el país se notificaron 4,650 casos de tuberculosis, de los cuales 940; es decir, el 20% fueron casos coinfectados de tuberculosis y VIH y una tasa de mortalidad de 1.2 muertes por cada 100,000 habitantes.



Durante 2023, en el país se notificaron 4,650 casos de tuberculosis, de los cuales 940; es decir, el 20% fueron casos coinfectados de tuberculosis y VIH y una tasa de mortalidad de 1.2 muertes por cada 100,000 habitantes.

Le siguen Santiago, San Cristóbal, La Altagracia, Puerto Plata, La Vega, Peravia, San Juan, San Pedro de Macorís, Duarte y Barahona en porcentaje de casos notificados al sistema de salud. Los datos están contenidos en el boletín epidemiológico correspondiente a la semana 29, del Ministerio de Salud Pública, que trae la tuberculosis como tema principal.



La tuberculosis es causada por un tipo de bacteria y suele afectar a los pulmones. Entre sus síntomas más característicos está la tos que puede durar por tres semanas o más, tos con sangre, dolor de pecho o al respirar o toser, pérdida de peso, fatiga, sudoraciones nocturnas y fiebre.

Se transmite por el aire cuando una persona infectada tose, estornuda o escupe. Se previene mediante vacuna.

Grupos de riesgos
Dentro de los grupos de riesgos de contraer tuberculosis en el país se encuentran la población de cero a 15 años, personas que viven con el VIH, contactos cercanos de pacientes, trabajadores de la salud, personas con diabetes mellitus, embarazadas y personas con difícil acceso a los servicios de salud.

Mientras, la población clave bajo vigilancia son los privados de libertad, migrantes, personas sin hogar y los que viven en extrema pobreza.

A nivel mundial, cada año se estiman aproximadamente 10.6 millones de personas que enferman de tuberculosis y 1.3 millones fallecen por esta causa; de ellas, 167,000 tenían coinfección con el VIH, lo que la convierte en una de las 10 principales causas de muerte y la principal causa por un único agente infeccioso (por encima del VIH/Sida).