En Guangzhou, China, decenas de proveedores chinos han protagonizado manifestaciones en la oficina de la plataforma de comercio electrónico Temu, gestionada por PDD Holdings, en protesta por las políticas de reembolso y las multas que consideran perjudiciales para sus negocios.
Los comerciantes, quienes venden productos en la popular plataforma que ha ganado terreno en Occidente por sus precios competitivos, exigen un cambio en las políticas que, según ellos, están destruyendo sus márgenes de ganancia.
Según reportes de medios locales como Yicai y The South China Morning Post, alrededor de 80 comerciantes se reunieron el lunes en el edificio de oficinas de Guangzhou, logrando algunos entrar en las instalaciones de Temu.
La policía intervino, y los manifestantes se dispersaron tras no conseguir una reunión con los ejecutivos de la empresa. Las protestas no se limitaron a este evento, aproximadamente 300 personas se han congregado en diferentes ocasiones durante el mes de julio para expresar su descontento.
Los comerciantes argumentan que las multas impuestas por Temu, derivadas de solicitudes de reembolso y quejas de clientes, están acabando con sus beneficios. Un comerciante declaró al South China Morning Post que perdió casi todas sus ganancias debido a una multa de aproximadamente 410,000 dólares. Otros han señalado que la plataforma frecuentemente reembolsa a los clientes sin exigir la devolución de los productos, lo que en la práctica permite a los consumidores quedarse con los artículos sin costo alguno.
Temu, por su parte, ha reconocido las protestas y está trabajando activamente con los comerciantes para encontrar una solución. En un comunicado al China Securities Journal, la empresa aseguró que no obtiene ganancias de las multas y que el dinero recaudado se destina a los consumidores. Además, afirmó que las protestas involucraron a unos pocos vendedores que se negaron a resolver disputas a través de los canales legales establecidos.
La controversia ha suscitado un amplio debate en las redes sociales chinas, donde la indignación crece hacia lo que muchos consideran un aprovechamiento por parte de los compradores occidentales. Blogueros y usuarios han expresado su descontento con las políticas de Temu, señalando que estas prácticas perjudican a los comerciantes locales mientras benefician a los consumidores extranjeros.