El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, intentará este viernes por la noche movilizar a sus bases sobre los valores de la familia, en un momento en el que le llueven las críticas por su posición ambigua sobre el derecho al aborto.
El millonario de 78 años es el invitado de honor de la reunión anual en Washington de «Madres por la Libertad», una asociación conservadora fundada en 2021 que hace campaña por los derechos de los padres y se ha convertido en estandarte de las «guerras culturales» en Estados Unidos, como los derechos LGBTQ+.
La asociación se opone a abordar la identidad de género u orientación sexual en los colegios.
Trump se ha jactado de haber permitido la cancelación en 2022 de la garantía constitucional del derecho al aborto mediante el nombramiento de tres jueces conservadores en la Corte Suprema.
Pero las críticas de los demócratas y el apoyo de una mayoría de la opinión pública al derecho al aborto hacen que el expresidente cuide ahora mucho más lo que dice sobre el tema.
Trump ha dicho que su administración sería «genial» para los derechos reproductivos, que es partidario de reembolsar la fertilización in vitro para que el país pueda tener «más bebés» y que el actual plazo de seis semanas para abortar en Florida, estado donde reside, es «demasiado corto».
El tema será objeto de un referéndum en Florida el día de las elecciones y en un puñado de otros estados muy reñidos.
La cuestión de la protección del derecho al aborto es central en el duelo entre Trump y la vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris, quien acusa a su rival de cambiar de opinión continuamente.
Los conservadores también lo acusan de haber traicionado al movimiento antiaborto al modificar su posición sobre este tema clave de las elecciones presidenciales estadounidenses.
Su equipo de campaña se retractó rápidamente de los comentarios sobre Florida, diciendo que Trump no especificó cómo votará en el referéndum.
«La mayoría de los estadounidenses apoyan el acceso al aborto, apoyan la fecundación in vitro, apoyan la anticoncepción. Él lo ha entendido finalmente y hará cualquier cosa para distraer la atención de su abismal y horripilante historial en este tema», declaró a periodistas Mini Timmaraju, directora del grupo de defensa Reproductive Freedom for All, en una conferencia telefónica.
El tema se ha convertido en un lastre electoral para el Partido Republicano haciendo que muchos se decanten por los demócratas, que han prometido restaurar este derecho en todo el país.