Vecinos de la calle Hermanas Carmelitas, en el ensanche Ozama, reclaman la poda de un árbol que invade sus espacios, produce muchas hojas y es lugar de reproducción de mosquitos, que ponen en peligro su salud.

El propietario del inmueble al que pertenece el árbol no hace nada por resolver el problema a pesar de las frecuentes solicitudes de los vecinos, que en algunas ocasiones han tenido que pagar para cortar algunas de las ramas.



De acuerdo al Diario Libre, estos tienen esperanza de que el Ministerio de Medio Ambiente o la Alcaldía de Santo Domingo Este se dignen en por lo menos cortar algunas de las ramas del frondoso árbol que afecta hasta la visibilidad de las viviendas cercanas.