Los precios del petróleo se replegaron el lunes tras declaraciones del presidente iraní consideradas como un intento por calmar los ánimos en medio de ataques masivos de Israel contra el movimiento proiraní Hezbolá en Líbano.
El precio del barril de Brent del mar del Norte para entrega en noviembre cerró en caída de 0,79% a 73,90 dólares.
En tanto, el barril de West Texas Intermediate (WTI) para igual fecha perdió 0,89% a 70,37 dólares.
Para Robert Yawger, de Mizuho, las declaraciones del presidente iraní, Masud Pezeshkian, durante una rueda de prensa con periodistas en Nueva York, hicieron cambiar de tendencia al mercado, que hasta entonces subía.
«Trata de calmar un poco la tensión en Medio Oriente», según el analista.
«Sabemos mejor que nadie que si una guerra más amplia estalla en Medio Oriente, no beneficiará a nadie en el mundo. Es Israel que trata de crear un conflicto más amplio», dijo el presidente iraní, cuyo mandato comenzó en julio.
Estas declaraciones ocurren en momentos en que Israel afirma haber alcanzado más de 1.300 objetivos de Hezbolá en las últimas 24 horas.
Los bombardeos dejaron 356 muertos, incluyendo 24 niños, pese a los llamados de la comunidad internacional a la moderación, según el Ministerio de Salud libanés.
Pezeshkian hablará el martes por la tarde durante la Asamblea General de la ONU. «Podría ser la ocasión de ampliar estas declaraciones», sostuvo Robert Yawger.
Irán es el mayor apoyo de Hezbolá, y es considerado clave en la región en un contexto de guerra entre Israel y Hamás.
A diferencia de Israel o Líbano, Irán es un importante productor de petróleo, con más de 3,4 millones de barriles por día de crudo en agosto, según la Agencia Internacional de Energía (AIE).
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, debería hablar el jueves en Nueva York delante de la Asamblea General.