Unas 500 personas llegaron a Siria desde el vecino Líbano, declaró el martes a AFP un responsable de seguridad sirio, tras los bombardeos israelíes del lunes, los más mortíferos desde la última guerra entre el movimiento libanés Hezbolá e Israel en 2006.
«Unos 500 libaneses atravesaron la frontera por los puestos fronterizos de Al Qusayr y Debusiya entre las 16H00 (13H00 GMT) y medianoche (21H00 GMT)», declaró este responsable, bajo condición de anonimato.
El martes, «vehículos seguían llegando a primeras horas de la mañana», añadió.
Israel bombardeó el lunes «unos 1.600 objetivos terroristas» en el sur de Líbano y en el valle de Becá, en el este, bastiones del movimiento islamista proiraní Hezbolá, que intercambia disparos casi diarios con el ejército israelí desde el inicio de la guerra en Gaza hace casi un año en apoyo a su aliado Hamás.
Al menos 558 personas murieron en esos ataques, entre ellas 50 niños y 94 mujeres, y 1.835 personas resultaron heridas, según un nuevo balance difundido el martes por el Ministerio de Salud libanés.