En otro final de infarto, los Dodgers de Los Ángeles vencieron este sábado 4×2 a los Yankees de Nueva York para adelantarse 2-0 en la Serie Mundial, pero quedaron en vilo por la lesión de su superestrella Shohei Ohtani.
El japonés sufrió una luxación parcial del hombro izquierdo en una acción en la séptima entrada y los Dodgers no confirmaron el periodo que necesitará de recuperación.
El lanzador japonés Yoshinobu Yamamoto puso las bases del triunfo local permitiendo sólo una carrera del dominicano Juan Soto en 6.1 entradas y los Yankees tuvieron una última opción de remontar en el último ‘inning’ pero desperdiciaron bases llenas.
Los Dodgers visitarán el lunes a los Yankees en el tercer capítulo de la Serie Mundial, la primera desde 1981 entre estas dos emblemáticas franquicias.
La eliminatoria proseguirá en el Bronx con un cuarto episodio el martes y, de ser necesario, un quinto el miércoles.
Los Yankees necesitarán todo el apoyo de su afición para reaccionar en esta eliminatoria al mejor de siete partidos, en la que los Dodgers se anotaron el primer triunfo del viernes con un memorable Grand Slam de Freddie Freeman que dio la vuelta al marcador en la décima entrada.
La fiesta del sábado en el Dodger Stadium, en cambio, no fue completa por la lesión de Ohtani, la gran figura del béisbol actual.
El japonés se lastimó al lanzarse en un infructuoso intento de robar la segunda base en la parte baja de la séptima entrada.
Adolorido en el suelo, Ohtani pidió ayuda a su equipo y abandonó el campo con el codo izquierdo doblado junto a uno de los preparadores.
Su entrenador, Dave Roberts, dijo a la prensa que a Ohtani se le había diagnosticado una «pequeña subluxación del hombro izquierdo» y aún debe ser sometido a otras pruebas para determinar la gravedad de la lesión.
Roberts, sin embargo, dijo estar «animado» ya que la «fuerza y rango de movimiento» del brazo de Ohtani son «buenos».
– Freeman brilla otra vez –
La franquicia angelina, que en diciembre ganó la puja por Ohtani entregándole 700 millones de dólares por una década, se cobró este sábado dividendos de su apuesta por otro pelotero japonés, Yoshinobu Yamamoto, a quien le otorgaron 325 millones por 12 años.
El lanzador novato dominó desde el montículo retirando a 11 bateadores seguidos tras el jonrón de Soto en la tercera entrada.
«Estaba deseando jugar este partido y estoy contento de que tuviera un gran final», declaró Yamamoto a la cadena Fox. «Todo ha funcionado muy bien para mí desde la primera entrada».
El cuadrangular de Soto había igualado la pizarra después de otro vuelacercas en el segundo ‘inning’ de Tommy Edman.
Yamamoto mantuvo después a raya al estelar Aaron Judge, ponchado en tres ocasiones durante la noche, y al resto de los ‘Bombarderos del Bronx’.
Del otro lado, en cambio, Carlos Rodón no pudo contener el asedio de los Dodgers en la decisiva tercera entrada.
El puertorriqueño Teóscar Hernández conectó el segundo jonrón de los locales impulsando también la carrera de Mookie Betts, el otro integrante del trío de MVP de los Dodgers junto a Ohtani y Freeman.
A continuación fue el propio Freeman el que ‘jonroneó’ por segundo partido seguido con un bombazo de 122 metros que hizo estallar de júbilo a los 52.725 espectadores.
– Final dramático –
Tras la que recibió Freeman, la otra gran ovación de la noche se la llevó Yamamoto cuando abandonó la lomita, donde está pintado el número 34 que portaba el mexicano Fernando Valenzuela, uno de los grandes lanzadores de los Dodgers, fallecido esta misma semana.
Yamamoto, de 26 años, permitió una carrera y un hit en sus primeras 6.1 entradas en el ‘Clásico de Otoño’.
Con la entrada de los relevistas, los Yankees encontraron una rendija para un último intento de remontar en la entrada final.
Soto redujo la distancia tras un sencillo de Giancarlo Stanton y, tras un hit de Jazz Chisholm Jr y un pelotazo a Anthony Rizzo, los Yankees coparon las bases con un out, amenazando con devolver el golpe del primer partido.
Pero el lanzador Blake Treinen contuvo los nervios y ponchó a Anthony Volpe antes de que Jose Trevino cometiera el tercer out con un fallo con elevado al jardín central.