Tras varias denuncias hecho por dirigentes políticos quienes aseguran que fueron agraciados con el Bono Navideño 2024.
El Gobierno dominicano a través de Supérate informó que todavía se está trabajando en la lista definitiva de beneficiarios y beneficiarias que cumplen con los requisitos de ese programa social.
«Aclaramos que las personas que han sido verificadas y que no cumplen con los parámetros establecidos no recibirán el apoyo gubernamental», explicó.
Asimismo, la entidad dijo que debido a la cantidad de personas que acceden al portal al mismo tiempo, este ha presentado fallas técnicas.
«Pedimos sinceras disculpas por los inconvenientes causados», puntualizaron.
Requisitos
Para ser elegible con el bono de 1,500 pesos, el beneficiario debe ser desempleado/a, o percibir un salario formalizado por la Tesorería de la Seguridad Social (TSS) que no supere los 30 mil pesos mensuales.
«Desde sus inicios, la distribución del Bono Navideño ha recaído en el Gabinete de Políticas Sociales, Gobernaciones Provinciales, Plan Social de la Presidencia, Programa Supérate y otras instituciones del Estado, así como también juntas de vecinos, iglesias y Organizaciones No Gubernamentales», establecieron.
Para las tarjetas del Bono Navideño se priorizan hogares de bajos ingresos y que se encuentren en situación de vulnerabilidad, transando en la nómina de Supérate, y que son categorizados como ICV-1 y ICV-2 en la base de datos de hogares elegibles del Sistema Único de Beneficiarios (SIUBEN).
Se recuerda que figuras como Zoraima Cuello, excandidata presidencial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) fue una de las beneficiadas.
“La falta de controles estrictos en la entrega y activación de las tarjetas deja espacio para que individuos con acceso indebido a la información se aprovechen del sistema”, comentó.
De su lado Frank Olivares, miembro del Comité Central del PLD, recordó los procedimientos usados para las ayudas sociales en los gobiernos del PLD en los que priorizar los beneficiarios se incluían cruces con la base de datos de la TSS y la base de datos del SIUBEN.
Ahora, explicó Olivares, “se recurre a un método excesivamente discrecional porque cada tarjeta es un monto al portador y no hay control de quién entrega ni a quién entrega.
Tampoco hay control de donde se utiliza, porque está hábil para ser gastado en cualquier comercio con un veriphone, que es lo que permite que una misma persona utilice muchas tarjetas y que no lo utilice para la cena de Navidad, que era la razón de ser original de las cajas que se entregaban en el pasado”, apuntó.