En La Vega, la doctora en enfermería Gabriela Castillo, con 29 años de servicio, ha denunciado su desvinculación del Hospital Dr. Luis Manuel Morillo King, una medida que, según ella, carece de justificación.
Castillo, quien implementó y coordinaba el programa de atención a adolescentes en el hospital, asegura que los rumores que la señalan por realizar supuestos «exorcismos» durante sus consultas han dañado su trayectoria profesional.
«Atiendo adolescentes que llegan con autolesiones; ahora incluso se cortan el abdomen y las piernas. Como madre, les pregunto si puedo orar por ellos. Pero ahora llaman a las oraciones ‘exorcismos’», expresó Castillo, quien se identifica como cristiana evangélica y aclara no pertenecer a ningún partido político.
Reclamo por su trayectoria y reputación
Castillo admite que su cargo era renovable cada dos años, pero considera que su despido merecía explicaciones debido a su larga y destacada carrera. Además, subraya que su pensión fue otorgada por méritos, ya que cuenta con 31 años de servicio, aunque tiene 58 años de edad.
«Mi problema no es que me hayan removido, sino que han manchado mi carrera con rumores infundados. Lo único que he hecho es servir a la sociedad dominicana», afirmó.
Apoyo de colegas y falta de pronunciamiento oficial
Gabriela Castillo es ampliamente reconocida en La Vega por su compromiso con la comunidad. Sus compañeras de trabajo han expresado solidaridad ante la situación, resaltando su dedicación y profesionalismo. Además, Castillo ha recibido reconocimientos como «Lámparas Doradas» y «Enfermera del Año» por su labor destacada en el ámbito de la salud.
Por el momento, las autoridades del Ministerio de Salud Pública no se han pronunciado sobre el caso, pero la denuncia de Castillo ha generado gran interés público, especialmente por el impacto de su labor en la comunidad vegana.
