En un reciente comentario en “El Sol de los Sábados”, Cristian Cabrera abordó un tema de gran relevancia para la infraestructura y el desarrollo de la República Dominicana: el destino del dinero proveniente del contrato de arrendamiento de Aerodom.
Este acuerdo, que extiende el arrendamiento de los aeropuertos dominicanos por más de 30 años, ha generado controversia y cuestionamientos sobre la transparencia y efectividad en el uso de los recursos involucrados.
Un contrato polémico desde su origen
La extensión del arrendamiento por más de tres décadas provocó reacciones diversas desde su anuncio, al considerar que lo adecuado habría sido convocar a una licitación pública internacional para garantizar mayores beneficios al país.
Sin embargo, una vez aprobado el contrato, el enfoque se ha centrado en evaluar sus resultados, específicamente en las prometidas remodelaciones en aeropuertos clave como el de Las Américas y el de Samaná.
Cristian Cabrera describió la situación actual del Aeropuerto Internacional de Las Américas como un “chiquero”, criticando las deplorables condiciones de sus instalaciones, las cuales contrastan con la imagen que el país quiere proyectar al recibir más de un millón de turistas al mes.
La promesa de Aerodom: ¿dónde está el dinero?
Aerodom se comprometió a entregar 775 millones de dólares al Estado dominicano para la ejecución de una serie de obras de infraestructura, entre las que se incluyen:
– El túnel de conexión hacia la autopista del sur.
– El hospital traumatológico de San Cristóbal.
– La solución vial entre la avenida República de Colombia y la Monumental.
– El puente paralelo al Jacinto Peinado, que conecta Villa Mella con el Distrito Nacional.
– El asfaltado de calles en La Caleta, Boca Chica y zonas circundantes al Aeropuerto de Las Américas.
No obstante, según Cabrera, hasta la fecha ninguno de esos fondos ha sido utilizado para las obras mencionadas. En cambio, el gobierno ha recurrido a otras partidas presupuestarias para financiar algunas construcciones, dejando en el aire la pregunta: ¿Dónde están los 775 millones de dólares entregados por Aerodom?
Desglose de obras prometidas y su realidad
El análisis de Cabrera incluyó un balance detallado sobre el estatus de las obras prometidas:
– Túnel hacia la autopista del sur: Es el único proyecto con avances significativos.
– Hospital traumatológico de San Cristóbal: La construcción ha iniciado.
– Vía expresa en la Plaza de la Bandera: Sin fondos de Aerodom.
– Expreso República de Colombia con avenida Los Próceres: Sin ejecución.
– Puente sobre el río Ozama: Ningún avance visible.
– Puente paralelo en la Gómez hacia Santo Domingo Norte: Sin inicio de obra.
– Paso a desnivel en Sabana Perdida: No ha iniciado.
Según el reporte de la Dirección General de Presupuesto, los fondos destinados al proyecto han sido utilizados bajo el concepto de “administración de activos y pasivos”, sin una asignación clara a las infraestructuras planificadas.
¿Cuál es el impacto de esta situación?
La falta de ejecución de estas obras afecta no solo la movilidad urbana, sino también la imagen del país frente al creciente flujo de turistas. Cabrera cuestionó el destino del dinero y la transparencia en la gestión de los fondos, enfatizando que el contrato de arrendamiento extiende la administración de Aerodom hasta 2060, lo que obliga al país a convivir con un estado deplorable en sus principales terminales aeroportuarias.
Reflexión final
La interrogante que planteó Cristian Cabrera resuena en la mente de muchos: ¿Dónde están los fondos de Aerodom?. La falta de claridad en su administración y la lentitud en la ejecución de las obras proyectadas generan desconfianza y preocupación sobre la gestión de recursos públicos en proyectos de infraestructura crítica para el país.
El llamado es a una mayor transparencia y rendición de cuentas sobre el uso de estos recursos, que representan una oportunidad significativa para mejorar la conectividad y competitividad de la República Dominicana en el ámbito internacional.