En una nueva sesión del Comité Nacional de Salarios, el sector empleador dominicano demostró una vez más su actitud constructiva y positiva, contribuyendo a una decisión que tendrá un impacto favorable para los trabajadores del país. Este esfuerzo adicional por parte de las empresas se enmarca en su accionar responsable, que, incluso en condiciones externas adversas como la pandemia, la recuperación económica y la inflación, ha permitido ajustes salariales por encima de las posibilidades reales en revisiones anteriores.
Las empresas reiteraron su compromiso con su activo más valioso: sus colaboradores. En esta ocasión, la posición del sector privado ha sido clave para lograr un ajuste salarial que triplica la inflación acumulada en el período. Este resultado refleja la voluntad del sector de priorizar el bienestar de los trabajadores, a pesar de los desafíos económicos actuales.
Sin embargo, los representantes del sector empleador hicieron un llamado a continuar impulsando las reformas necesarias para estabilizar, crecer y mejorar la generación de empleos en el país. Reconocieron que existen retos importantes para aumentar la productividad y competitividad, los cuales impactan a empresas de todos los tamaños. En este sentido, destacaron la importancia del diálogo tripartito como base de las relaciones laborales, confiando en que, a través de este mecanismo, se puedan alcanzar los acuerdos necesarios para seguir avanzando.
Además, el sector empleador abogó por la institucionalidad y modernización del Comité Nacional de Salarios. Aspiran a que, en las próximas sesiones, se utilice una normativa reformada que garantice decisiones equilibradas y basadas en análisis objetivos de indicadores económicos. También esperan que el Gobierno desempeñe un rol de mediador imparcial, facilitando las condiciones para una correcta deliberación entre las partes.
En este contexto, se hizo referencia al estudio publicado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en 2024, titulado «Características, causas y factores determinantes de la informalidad en la República Dominicana». El informe señala que los altos costos tributarios y administrativos asociados al estatus formal, junto con las complejas regulaciones del salario mínimo y los costos laborales no salariales, son factores clave que empujan a las empresas a operar en la informalidad.
Ante esta realidad, el sector empleador insistió en la urgencia de una actualización integral del Código Laboral, que permita reducir las altas cargas laborales y mitigar su impacto negativo. En particular, se destacó la necesidad de reformar el modelo actual de cesantía, el cual no solo afecta la competitividad de las empresas, sino que también dificulta el abordaje de temas como el salario.
En conclusión, el sector empleador reafirmó su compromiso con el diálogo y la búsqueda de soluciones que beneficien a todos los actores de la economía dominicana. Sin embargo, subrayó la importancia de avanzar en reformas estructurales que permitan un entorno laboral más justo, competitivo y sostenible para el futuro.