El «narco de los narcos» Rafael Caro Quintero, uno de los 29 narcotraficantes mexicanos entregados a Estados Unidos, se declaró este viernes «no culpable» de crimen organizado y tráfico de drogas, entre otros cargos, en su primera comparecencia ante la justicia estadounidense.
Tras declarar al juez que había leído los cargos que se le imputan, a través de su abogado Caro Quintero se declaró «no culpable» en una sala abarrotada de agentes de la DEA, la agencia antidrogas estadounidense que le acusa del homicidio de uno de sus hombres, Enrique «Kiki» Camarena, en 1985.
«Después de 40 años, el hombre que asesinó al agente especial de la DEA Enrique Camarena está aquí para hacer frente a la justicia estadounidense», dijo la fiscal Saritha Komatireddy en la vista.
El acusado, que llegó a la sala del tribunal de Brooklyn esposado con las manos en la espalda y fuertemente custodiado, es «responsable de la muerte de muchos estadounidenses», agregó la fiscal.
Antes que él, compareció otro de los narcotraficantes enviados por México la víspera, Vicente Carrillo Fuentes, que también se declaró «no culpable» durante la vista.
Su envío a Estados Unidos, «demuestra la tenacidad de innumerables miembros del sistema de justicia penal que trabajan duro y arriesgan sus vidas para proteger a nuestras comunidades de los narcotraficantes, independientemente de dónde se encuentren», dijo por su parte el fiscal del tribunal, John Durham, a la prensa al fin de la vista.
«Nunca se puede matar a un agente de la DEA y (…) nunca se saldrá con la suya. Nunca permitiremos que eso ocurra, y nunca lo olvidaremos», advirtió.
Conocido como «narco de los narcos», el capo de 72 años es considerado por la Casa Blanca como uno de los «jefes de cártel más malvados del mundo».
Miembro fundador del cártel de Guadalajara, una organización mexicana de narcotráfico a gran escala, predecesora del cártel de Sinaloa, está considerado junto con sus socios por la fiscalía neoyorquina como los «pioneros de la industria del narcotráfico mexicana».
– ¿Traslado o extradición? –
A petición del juez Robert Levy, la fiscalía del tribunal de Brookly aclaró que ambos fueron entregados por México y no «extraditados», lo que confirmaron las autoridades mexicanas, alegando razones de «seguridad nacional».
El fiscal general de México, Alejandro Gertz, dijo este jueves a la prensa que el «traslado» se realizó de esta manera ante informaciones de que algunos jueces buscaban retrasar deliberadamente su envío a Estados Unidos, que los reclamaba por varios delitos.
Las autoridades también evaluarán si los acusarán de terrorismo después de que la administración de Trump designó como terroristas a seis bandas criminales mexicanas: los cárteles de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación (CJNG), del Noreste (antes los Zetas), del Golfo, la Nueva Familia Michoacana y Cárteles Unidos.
En medio de crecientes presiones comerciales de la administración de Donald Trump para que México detenga el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos, las autoridades mexicanas mandaron sin proceso previo de extradición el jueves a 29 de sus más notorios narcotraficantes a Estados Unidos.
El presidente republicano ha anunciado la imposición de aranceles a las importaciones mexicanas a partir del martes.
Estados Unidos acusa al grupo de narcotraficantes de importar al país «cantidades ingentes de veneno», como la cocaína, metanfetaminas, fentanilo y heroína, enfrentan cargos por crimen organizado, narcotráfico, asesinato, uso ilegal de armas, lavado de dinero y otros actos de violencia.
El departamento de Justicia estadounidense evaluará si Caro Quintero y otros cuatro de los extraditados pueden ser condenados a pena de muerte.