Una obra que se resiste a concluir: el eterno camino de la Circunvalación de Los Alcarrizos
Iniciada en 1996 bajo el primer mandato de Leonel Fernández, la hoy llamada Circunvalación de Los Alcarrizos parece arrastrar una historia interminable de promesas, abandono y reactivaciones intermitentes. Desde aquel año en que se colocó la primera piedra, han pasado cerca de 29 años, y la obra aún no ha sido terminada.
Originalmente conocida como “Nuevo Camino”, la obra fue paralizada el mismo año de su inicio. A lo largo de varios gobiernos, el proyecto fue ignorado por completo hasta que en enero de 2021, el actual gobierno decidió retomarlo, dándole un nuevo impulso y renombrándolo como la Circunvalación de Los Alcarrizos.
Aunque en un momento los trabajos parecían tomar ritmo, el puente que forma parte clave de esta vía —el que conecta la carretera Ato Nuevo con Caballona y Los Americanos— llevaba más de un año sin avances significativos. No fue sino hasta hace pocos días que se retomaron los trabajos, reactivando las esperanzas de los moradores que, por años, han exigido su terminación.
El panorama para los peatones es aún más crítico. En lugar de un paso seguro, deben cruzar por improvisadas estructuras de tablones sobre zanjas y escaleras de tierra erosionadas por la lluvia. Las imágenes muestran a personas mayores enfrentándose a un trayecto riesgoso, sin barandillas ni medidas mínimas de seguridad.
El puente, de tipo cajón, ha avanzado parcialmente. Se ha vaciado el tablero central, pero aún falta completar el vaciado que une los estribos con el nivel de la carretera. A su alrededor, zonas que han servido como vertederos improvisados empiezan a transformarse con el reinicio de los trabajos, aunque lentamente.
La Circunvalación de Los Alcarrizos tiene una extensión de 6.3 kilómetros, con tres carriles por sentido, y será clave en la interconexión con la Circunvalación de Santo Domingo y la Autopista Duarte. Esta carretera promete convertirse en una vía esencial para descongestionar el tránsito en la zona, especialmente al conectar con la estación multimodal ubicada en la entrada de Los Alcarrizos, donde se integran el Teleférico y la línea 2 del Metro de Santo Domingo.
A pesar de su estado incompleto, esta carretera ya es utilizada por cientos de conductores que buscan evitar los tapones de Los Alcarrizos, en especial en las horas pico. Sin embargo, su condición actual, con tramos aún de cascajo y piedras sueltas, causa daños a los vehículos y representa un reto diario.
Otro aspecto que ha retrasado la obra son las expropiaciones de terrenos. Muchos propietarios siguen esperando el pago correspondiente por sus viviendas, ubicadas en el trazado del proyecto.
Hoy, solo se observa movimiento en el área del puente de Ato Nuevo. El resto de la vía permanece estancado. Pero cuando finalmente se culmine, la Circunvalación de Los Alcarrizos será una arteria vital que permitirá a los autobuses de la estación multimodal dirigirse hacia el Cibao o el sur sin utilizar la saturada Autopista Duarte.
La esperanza persiste. Los moradores, cansados pero no resignados, siguen esperando que esta obra, símbolo de abandono y persistencia, se convierta en una realidad terminada que transforme positivamente su calidad de vida y el tránsito en la zona.