Las llagas en la boca, también conocidas como aftas, son pequeñas úlceras dolorosas que aparecen en la mucosa oral, afectando actividades tan cotidianas como hablar, comer o cepillarse los dientes. Aunque suelen desaparecer por sí solas en unos días, existen remedios caseros que pueden acelerar su curación y aliviar el malestar.
¿Por qué salen las llagas?
Las causas más comunes de las llagas en la boca incluyen:
- Sistema inmune debilitado: El estrés, el cansancio o ciertas enfermedades pueden hacer que el cuerpo sea más propenso a desarrollar estas molestias.
- Lesiones en la boca: Mordeduras accidentales, uso de frenillos o prótesis dentales mal ajustadas pueden causar aftas.
- Alimentos irritantes: Cítricos, comidas picantes o muy calientes pueden desencadenar su aparición.
- Déficit nutricional: Niveles bajos de hierro, vitamina B12, ácido fólico o zinc pueden contribuir a su desarrollo.
- Cambios hormonales: Muchas personas notan la aparición de llagas en momentos de fluctuaciones hormonales, como durante el ciclo menstrual.
Remedios caseros para las llagas en la boca
Si buscas soluciones naturales para este problema, aquí tienes algunos de los remedios más efectivos:
- Enjuagues con agua salada
Mezcla una cucharadita de sal en un vaso de agua tibia. Realiza enjuagues varias veces al día para ayudar a desinfectar y cicatrizar. - Bicarbonato de sodio
Prepara una pasta con bicarbonato y un poco de agua. Aplícala directamente sobre la llaga para neutralizar la acidez y reducir la inflamación. - Aloe vera
El gel natural de esta planta es antiinflamatorio y regenerador. Aplica una pequeña cantidad sobre la úlcera para calmar el dolor y favorecer la curación. - Manzanilla con miel
Haz una infusión de manzanilla y agrégale una cucharadita de miel. Puedes hacer enjuagues o tomarla tibia. Esta combinación tiene propiedades calmantes y antisépticas. - Aceite de clavo
Utilizado por sus propiedades analgésicas, se puede aplicar con un hisopo directamente en la llaga para aliviar el dolor. - Leche con cúrcuma
Mezcla media cucharadita de cúrcuma en una taza de leche tibia. Esta bebida, tomada dos veces al día, ayuda a reducir la inflamación. - Aceite de coco
Realizar buches con una cucharada de aceite de coco actúa como antimicrobiano natural y favorece un ambiente más saludable en la boca. - Hielo o compresas frías
Aplicar un cubo de hielo envuelto en un paño directamente en la zona ayuda a calmar el dolor y bajar la inflamación.
¿Cuándo preocuparse?
Aunque la mayoría de las llagas desaparecen por sí solas en una o dos semanas, si notas que persisten por más tiempo, aparecen con frecuencia o se acompañan de fiebre o ganglios inflamados, lo mejor es consultar con un especialista.