El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo este miércoles a Elon Musk que puede seguir formando parte de su equipo el tiempo que quiera pero reconoció que el jefe de Tesla, de la red social X y de SpaceX debe ocuparse de sus negocios.
El mes pasado Musk anunció que renunciará a su cargo como rostro visible de la comisión de eficiencia gubernamental, conocida como DOGE, desde donde multiplicó los despidos y recorte de gastos federales. Su objetivo es centrarse más en su compañía de automóviles eléctricos Tesla, cuyas ganancias cayeron en el primer trimestre del año 71% respecto al mismo período de 2024.
«La gran mayoría de la gente en este país realmente te respeta y aprecia», le dijo Trump a Musk durante una reunión de gabinete en la Casa Blanca, que podría ser la última antes de que el hombre más rico del mundo renuncie a su puesto.
«Sabes que estás invitado a quedarte todo el tiempo que quieras», comentó Trump, antes de añadir que Musk podría querer volver «con sus autos».
Tesla, principal fuente de riqueza de Musk, ha sufrido las consecuencias de la implicación política de su propietario como asesor cercano de Trump.
Los vehículos han sido blanco de actos vandálicos y de llamadas de boicot en Europa y Estados Unidos.
«Verdaderamente has sacrificado mucho. Te han tratado de manera muy injusta», dijo Trump sobre los detractores de Musk.
«Les gustaba quemar mis coches, lo cual no es bueno», respondió Musk.
David Sacks, un aliado cercano de Musk y miembro de la administración Trump, declaró la semana pasada que Musk no dejaría DOGE, sino que reduciría el papel que desempeña en la comisión.
Es lo mismo que hizo cuando tomó el control de Twitter (ahora X) en 2022, afirmó. En cuanto tuvo la sensación de que contaba «con personas en quienes confiaba» pasó «a un modo de mantenimiento», declaró Sacks en el pódcast All-In.
