El Observatorio Nacional para la Protección del Consumidor (ONPECO) denunció un nuevo incremento en el precio del botellón de agua y pidió al gobierno que intervenga para proteger a los consumidores de los abusos de quienes ostentan una posición dominante en el mercado de un bien tan esencial como el agua.
Con el nuevo incremento un botellón de aguabse vende en los colmados a 115 pesos, denunció.
Dijo que los consumidores han denunciado que este aumento carece de justificación, ya que el agua es un recurso otorgado por la naturaleza que ha sido apropiado por empresas privadas con fines comerciales.
Durante el pasado fin de semana, muchos ciudadanos expresaron su indignación, y algunos llegaron a sugerir que el gobierno confisque las plantas procesadoras por el abuso que representa el alza del precio de este alimento.
El Observatorio dijo que el agua ha sido declarada un alimento esencial por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y un derecho humano fundamental, garante de otros derechos, por las Naciones Unidas.
Manifesto que desde el año 2020 hasta la fecha, el precio del botellón de agua ha aumentado en más de un 300 %.
Recordó que en marzo de 2020 costaba 40 pesos; a finales de ese mismo año subió a 75 pesos, en el 2024 llego a 100 y actualmente se vende entre 110 y 115 pesos, según reportes de los propios consumidores.
Onpeco sostuvo que dado que existe una posición dominante en el mercado, considera necesario que el organismo regulador de la libre competencia intervenga para evitar mayores perjuicios a los consumidores, quienes ya enfrentan alzas en otros bienes y servicios. Aunque la posición dominante no constituye un delito por sí misma, sí facilita prácticas abusivas.
«En el caso del agua, al menos debería exigirse a las empresas que comuniquen con anticipación cualquier aumento y lo sustenten en sus costos, en lugar de aplicar alzas arbitrarias» subrayó.
ONPECO recordó que la creación de organismos oficiales para la defensa del consumidor y la regulación de la competencia fue una recomendación de la Organización Mundial del Comercio (OMC) a los gobiernos, con el objetivo de proteger a los ciudadanos frente a distorsiones del libre mercado.
En ese sentido, ONPECO reclama a ProCompetencia que cumpla con su deber respecto a la oferta de agua potable, ya que una empresa ostenta una posición dominante que, aunque legal, puede traducirse en abusos contra los consumidores.
Frente a las protestas de los usuarios que han “puesto el grito al cielo” por la nueva alza, ONPECO reiteró que una vía para romper el monopolio y beneficiar a la población es que instituciones estatales como la CAASD y CORAASAN vendan agua a precio justo.
Estas entidades cuentan con laboratorios y mecanismos de control que les permitirían garantizar la calidad del agua comercializada.
Esta acción no constituiría una competencia desleal, sino el cumplimiento del deber del Estado de proteger a su gente.ONPECO también observó que, paradójicamente, cuando se registran lluvias intensas y las aguas se enturbian, es cuando las empresas proveedoras elevan los precios.
«Si estas empresas tienen la capacidad de almacenar agua con fines especulativos, lo correcto es que el Estado haga lo mismo, almacenando agua para garantizar el abastecimiento y evitar la escasez artificial»,dijo.
.En conclusión, ONPECO sostiene que, al tratarse de un derecho humano esencial, el agua debe llegar a la población en condiciones de calidad y a un precio justo. Esto solo será posible si se rompe el monopolio sobre un producto vital para la vida.
o