Santiago de los Caballeros, la segunda ciudad más importante de República Dominicana, se ha convertido en un terreno fértil para la llegada de franquicias tanto nacionales como internacionales.
Su creciente desarrollo económico, la diversidad de su población y una cultura de consumo en constante evolución la han posicionado como un destino atractivo para la expansión comercial. Sin embargo, no todas las apuestas empresariales logran consolidarse en este mercado competitivo y exigente.
En esta ciudad, los aciertos y tropiezos de las franquicias revelan una realidad compleja, donde factores como la ubicación, la adaptación al gusto local, la calidad del servicio y la estrategia de mercadeo juegan un papel crucial. Mientras algunas cadenas han logrado establecerse con éxito y convertirse en parte del día a día de los santiagueros, otras han cerrado sus puertas tras no cumplir con las expectativas del mercado. Este análisis aborda las lecciones que dejan ambos escenarios.