El 31 de mayo de 1964 marcó un antes y un después en la forma en que los dominicanos vivían el béisbol. Ese día, por primera vez, un juego de Grandes Ligas fue transmitido en vivo desde Estados Unidos hacia la República Dominicana.
La señal radial llegó desde el Shea Stadium de Nueva York, donde los Gigantes de San Francisco enfrentaban a los Mets. Fue un momento histórico: por primera vez, los fanáticos dominicanos pudieron seguir cada jugada en tiempo real, sin esperar resúmenes o versiones diferidas. El béisbol, por fin, sonaba aquí al mismo tiempo que allá.
Detalla la nota de Idelfonso Ureña que el actor principal en el terreno de juego fue Juan Marichal, lanzador estelar de los Gigantes, quien tiró juego completo en la victoria 5-3 de su equipo. Su actuación no solo ayudó a su equipo, sino que se convirtió en símbolo de orgullo para todo un país que lo escuchaba a través de las ondas radiales.
Recordar que la primera transmisión se hizo en 1963, un juego recreado a través del teletipo en donde se ponía de manifiesto la gran imaginación y conocimiento del juego de los narradores y comentaristas, que hacían de estas, un deleite!! porque escucharlos, narrando, bolas y strikes era inimaginable pensar de la forma, como se recibía la señal del partido,
Ese encuentro fue también el primero de una doble cartelera que terminó convirtiéndose en la más larga de la historia de las Grandes Ligas, con un total de 23 entradas. Una jornada extensa que arrancó con un hecho trascendental: la conexión directa entre el béisbol de las Mayores y la afición dominicana.
Don Ellis Pérez fue el productor y autor de la idea, a Don Ellis se le reconoce como el principal artífice en las transmisiones radiales del béisbol de Grandes Ligas. El internacional Don Billy Berroa, narrador, Don Tomás Troncoso, el tecnico de los ojos verdes, comentarista.
Fue una transmisión a través de Radio Universal 650 AM.
Desde entonces, las transmisiones en vivo han sido parte del día a día deportivo en el país. Pero aquella primera vez, cuando la voz del juego cruzó el mar, sigue siendo una fecha para recordar. Fue el inicio de una nueva etapa, en la que la pasión por la pelota se vivió con más intensidad que nunca.