Los perros pueden tener discapacidades que afectan su calidad de vida y que requieren atenciones especializadas. Ante esto, las prótesis caninas representan soluciones que dependen de la condición de cada mascota.
Si nunca habías escuchado hablar de las prótesis caninas, debes saber que son parecidas a las de humanos y que están diseñadas para reemplazar o complementar partes del cuerpo que han tenido que ser removidas por “traumas, neoplasias o malformaciones”, explica la veterinaria Virmari Vásquez.
“La función, básicamente, es sustituir o complementar aquella parte del cuerpo que se ha dañado o removido por alguna condición”, asegura.
Las prótesis caninas pueden ser dolorosas en el proceso de adaptación, pero mejoran la calidad de vida del animalito. Su precio dependerá del abordaje que necesite la mascota o de los aparatos a utilizar.
Detalla Lauren Jiménez en el Listin Diario que dentro de los tipos de prótesis se encuentra la de extremidades, que se usa cuando la mascota ha perdido total o parcialmente una de sus patas; de fracturas, donde se utilizan prótesis ortopédicas internas como, clavos, placas y reemplazos articulares, según las informaciones brindadas por Virmari.
En el caso de los carritos ortopédicos, tienen una función similar a las prótesis y la veterinaria aclara que se utilizan cuando la mascota presenta ataxia del tren posterior, que significa “inmovilidad de las patas traseras”.
La revisión de los perros debe ser frecuente, pero depende del tipo de prótesis que les sea implantada. Por lo regular, cada uno o tres meses. Aunque, se da el caso de que algunos tengan que ir cada semana, pero por un tiempo determinado.
“Estos pacientes en su mayoría deben recibir terapia física en donde se hace un abordaje de rehabilitación y manejo del dolor”, dice Virmari.
Discapacidades físicas caninas

Las prótesis caninas pueden ser dolorosas en el proceso de adaptación, pero mejoran la calidad de vida del animalitoCanva
Las discapacidades físicas en un canino van desde el nacimiento hasta el envejecimiento. Las de nacimiento son llamadas congénitas, y en las de envejecimiento se incluyen la osteartritis y mielopatias degenerativas.
También, hay enfermedades por predisposición racial, que son la displasia de cadera o de codo; así como las virales: distemper o moquillo canino.
“Algunas de estas discapacidades limitan a nuestras mascotas a tener una vida normal, requiriendo atenciones especializadas, como revisiones periódicas por un veterinario especialista y posiblemente terapias físicas, como también adecuar el lugar donde van a convivir, algunos requieren medicación continua, y asistencia de sus propietarios”, puntualiza Vásquez.
¿Cómo se debe cuidar un perro con discapacidad?

En el caso de los carritos ortopédicos, tienen una función similar a las prótesis y se utilizan cuando la mascota presenta inmovilidad de las patas traserasCanva
Las mascotas con discapacidad física requieren un cuidado especial, con responsabilidad, paciencia y amor.
Un peso óptimo, una dieta adecuada y un lugar donde no corran el riesgo de lastimarse son importantes, detalla Virmari Vasquez. Además, el cuidador debe jugar un rol fundamental, ocupándose de que los perritos puedan hacer sus necesidades fisiológicas sin dificultad y llevarlos puntualmente a su cita con especialistas.