Lo que comenzó como un atraco más en las calles de San Cristóbal, terminó en una escena sangrienta marcada por la traición y las balas. Dos jóvenes fueron abatidos a tiros la noche del sábado por sus propios compañeros de fechorías, en medio de una disputa por el reparto de lo robado.
Eran alrededor de las 10:20 p.m. cuando Edwin Collado, alias «Eguin», de 18 años, y Estiben Candelario Brioso, de 19, se desplazaban a bordo de una motocicleta marca XPRESS, color azul. Junto a ellos iban otros dos jóvenes, en otra moto, aún sin identificar. Todos, según el informe preliminar de la Policía Nacional, venían de cometer un asalto en la avenida 6 de Noviembre, cerca del lugar conocido como El Viajero.
Detalla el Luis Guzmán que la codicia les ganó la partida. Al parecer, la discusión por cómo repartirse el botín se tornó violenta, y los dos acompañantes sacaron armas de fuego y dispararon sin piedad. Collado y Candelario cayeron mortalmente heridos, mientras sus verdugos huyeron en la otra motocicleta, dejando atrás cuerpos y silencio.
Ambos fallecidos residían en sectores populares de la ciudad: Collado en Jeringa y Candelario en La Piña, del barrio Madre Vieja Norte. La Policía los identificó como miembros de una banda de atracadores y aseguró que trabaja para identificar y capturar a los responsables del doble homicidio.
En San Cristóbal, el crimen no descansa. Y a veces, la traición llega más rápido que la justicia.