Mientras algunos sectores se oponen a los trabajos para la solución vial de la avenida República de Colombia, específicamente de su ampliación del tramo que comprende el Jardín Botánico, miles de conductores y los residentes de la zona continúan sufriendo a diario las dificultades al desplazarse por esa vía.
Desde hace varios años, la avenida República de Colombia viene sucumbiendo ante el exorbitante tráfico vehicular, la explosión habitacional y el auge de plazas comerciales, convirtiéndose en uno de los tres principales nudos viales del Distrito Nacional.
Como parte de la solución, el Gobierno, a través del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), inició los trabajos de ampliación de la vía desde la avenida Jacobo Majluta, partiendo desde la autopista Duarte (prolongación 27 de Febrero) hasta la avenida Los Próceres, con recursos provenientes de la renegociación del contrato con Aeropuertos Dominicanos Siglo XXI (Aerodom).
De acuerdo a Joan Vargas en el DIA, La ampliación vial se extenderá por alrededor de 10 kilómetros e incluirá una nueva vía troncal expresa que contempla la construcción de un túnel de 580 metros, el cual saldría frente al Jardín Botánico y beneficiará a más de 1.4 millones de habitantes de la zona norte del Distrito Nacional.
Posición oficial
El Ministerio de Obras Públicas informó que hasta el momento no hay ninguna decisión definitiva respecto a la posible utilización de una parte del Jardín Botánico para dar paso a la ampliación vial.
Addis Burgos, encargada de Comunicaciones de dicho ministerio, explicó que se mantiene una conversación abierta con el Ministerio de Medio Ambiente, responsable de realizar el estudio de impacto ambiental requerido por ley.
“Se encontraron unos planos que no se produjeron bajo la dirección del actual ministro y que han sido sometidos a estudios ambientales. No se va a producir ninguna decisión que no sea ambientalmente aprobada”, manifestó Burgos.
Agregó que en el Ministerio de Obras Públicas no se está dando seguimiento a ningún proyecto gestionado en administraciones anteriores que sea de malestar social.
De su lado, César Rodríguez, miembro del Consorcio Ambiental Dominicano, opinó que la solución no sería la ampliación de la avenida República de Colombia, sino la ejecución de obras que faciliten la circulación del tránsito vehicular en las intersecciones con las avenidas Los Próceres y Carlos Pérez Ricart, donde —según dijo— se genera la mayor congestión.
Caos vehicular diario
Salir a través de la avenida República de Colombia en horas de la mañana, como lo hace la mayoría de sus habitantes, requiere anticiparse una o dos horas debido a los frecuentes tapones. Por ello, los trabajos de ampliación vial son vistos por muchos como un alivio necesario.
Un estudio del Plan de Ordenamiento Territorial del Distrito Nacional confirma que la zona norte ha sido la de mayor crecimiento demográfico, triplicando su población en los últimos 30 años. Además, la vía alberga alrededor de 2,000 establecimientos comerciales.
Otro elemento que agrava la situación en los estrechos carriles de la avenida República de Colombia es la circulación de vehículos pesados que cruzan desde la avenida Jacobo Majluta hasta la Monumental o Sol Poniente, generando largas filas de vehículos que se extienden hasta el Jardín Botánico, sin rutas de escape viables.
Adicional a esto, negocios como estaciones de combustibles y centros comerciales entorpecen la vía con la apertura de cruces y retornos, creados para facilitar el acceso de sus clientes.
Asimismo, las avenidas República de Colombia y Jacobo Majluta reciben una carga adicional por los visitantes diarios a la Embajada de los Estados Unidos, generando aún más presión al tránsito local.
Debido al alto flujo vehicular, es habitual ver entre tres y cuatro agentes de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) en las intersecciones, aplicando contraflujos según el horario para viabilizar la circulación.